Vitto Saravia: El embarazo de su primer hijo, cómo le gustaría que sea el parto y su “peor experiencia” en la televisión
Desde chiquita –ella dice que tenía seis años–, Victoria Saravia (38) tenía muy marcada su pasión por la moda. Pero vivía en Melo, una localidad del interior uruguayo, y allí no llegaban las marcas que ella veía en las revistas, así que tuvo que ingeniárselas para seguir las tendencias: “Me compraba telas y hacía mi ropa con una modista”, recuerda. A los 22 años, para cumplir su sueño de ser modelo –quería seguir los pasos de sus admiradas Pampita y Nicole Neumann– dejó Uruguay y se mudó a Buenos Aires, donde comenzó una carrera en la agencia de Pancho Dotto e hizo algo más que sorprendió a quienes la conocían: estudió periodismo. Fresca y espontánea, pronto se hizo un lugar como conductora de Fútbol para Todos, en Fox Sports, y panelista en Intratables y Desayuno Americano. Su paso por la televisión no terminó, sin embargo, como esperaba: “Bailando por un Sueño fue la peor experiencia de mi vida, por cómo me trataron. Me di cuenta de que todo era una gran farsa, me sentí muy mal y ahí decidí apartarme de la tele”, asegura. Vivió unos años en los Estados Unidos, donde retomó su carrera como modelo, pero una vez más dejó todo para volver a Buenos Aires, esta vez por amor: privilegió su relación con el DJ Manuel Desrets (34), con quien espera su primer hijo, Lio. “Lo conocí en Punta del Este en 2017, durante unas vacaciones. Ahí empezó a suceder algo, había una energía. Yo me volví a Nueva York y estuvimos separados seis meses, aunque seguíamos hablando, y él me vino a visitar. Vivimos juntos un año en España y nos separamos en 2019 porque él quería vivir en Barcelona, y yo en Madrid. Nuestras vidas iban por diferentes caminos”, cuenta Vitto.
-Parecía un amor destinado a no prosperar, pero ahora están juntos. ¿Quién dio el primer paso para el reencuentro?
-Fue él, me llamó una Navidad, después de la pandemia. Hacía un año que no hablábamos. Yo lo quería un montón y sabía que era buena persona. Siento que ambos hicimos nuestros procesos, y cuando nos reencontramos, volvió a suceder el amor. Cortar fue lo más maravilloso que le pasó a nuestra pareja, porque puse todas mis condiciones antes de volver [Se ríe]. Había un miedito mío, porque me decía a mí misma “Este es DJ, mmm. ¿En qué andará?”. Y acá estamos, felices juntos y por tener un bebé.
-Cuando empezaste a salir con él, hubo una polémica porque él había sido novio de Silvina Luna, quien fue amiga tuya. ¿Cómo fue?
-La historia estuvo mal contada. Nadie quiere estar con el exnovio de una amiga. Silvi y yo nunca fuimos mejores amigas, ella era una amiga de mi grupo. Y tampoco hubo una pelea entre nosotras, simplemente la relación se cortó cuando me fui a Nueva York. Después conocí a Manu, y dio la casualidad de que era su ex. Fue algo que pasó, no lo elegí.
-¿Pudiste tener una charla con ella?
-Sí. Ella había dicho que se enteró de mi relación con Manu por la tele. No tengo ningún rencor por eso, porque fue una respuesta mediática que dio, pero de las puertas hacia adentro sabemos lo que sucedió realmente. También entiendo que estuviera enojada. Cuando pasó el tiempo, nos volvimos a cruzar, charlamos y nos reímos del asunto. La última vez que la vi fue un año antes de que muriera, en el cumpleaños de una de nuestras mejores amigas. Me dolió mucho su muerte. Más allá de las discrepancias, ella era muy buena.
-Volviendo a tu amor… ¿Qué es lo que más te gusta de Manu? ¿Te lo imaginaste como padre de tu hijo?
-Yo nunca pensé en casarme ni tener hijos. Pero sí estaba segura de que si en algún momento quedaba embarazada de Manu, él iba a ser el mejor padre para mis hijos. Tiene una bondad y un corazón enormes. todas las ecografías, quiere sentir, ver, tocar, ser parte. Él siempre quiso tener hijos, mientras que yo dudaba… Pensaba que cuando decidiera ser mamá, se me iba a terminar la vida. Ahora entiendo que comienza una nueva.
-¿Cuándo fue que decidieron empezar a buscar?
-Fue loco lo que pasó. Ya el año pasado, con 37 años, empecé a pensar en que la edad biológica me corría. Dije “Voy a congelar óvulos” y me di cuenta de que era un trámite bastante hostil. Me trataron como si fuera un número, hasta que di con un médico que me hizo unos estudios que me dieron mal, tenía muy baja la hormona antimulleriana y era prácticamente estéril.
-¿Iniciaste un tratamiento?
-Fue raro. Los primeros dos días estuve mal, pero pensé que el resultado de un análisis no me iba a condicionar. En mis vacaciones dije “Cuando vuelvo, me ocupo”. Seguí mi vida como siempre y quedé embarazada de forma natural.
-¿Cuál fue la reacción de Manu?
-Uh, fui muy bruta. Él estaba en el sillón y yo le dije “Gordi, estoy embarazada”. Me dijo “¿Cómo sabés?”. Le mostré el test. Explotó de alegría, me abrazó y me dijo que quería comprar un test para hacerlo conmigo y vivir el proceso. Se va a llamar Lio, que es un nombre que eligió Manu. Me imagino con un varoncito y me hace mucha ilusión. En mi familia somos todas mujeres.
-¿Cómo te gustaría que sea el parto?
-Me encantaría que sea en el agua. Voy a elegir un parto respetado. Quiero volver a las raíces, que todo sea lo más natural posible.
Maquillaje: Irene Arcieri @irearcieri
Peinado: Cristina Cagnina para Cerini Hair @cristinacagnina
Estilismo: Juliana Blanco @whitejewels
Agradecimientos: Gone
Desde chiquita –ella dice que tenía seis años–, Victoria Saravia (38) tenía muy marcada su pasión por la moda. Pero vivía en Melo, una localidad del interior uruguayo, y allí no llegaban las marcas que ella veía en las revistas, así que tuvo que ingeniárselas para seguir las tendencias: “Me compraba telas y hacía mi ropa con una modista”, recuerda. A los 22 años, para cumplir su sueño de ser modelo –quería seguir los pasos de sus admiradas Pampita y Nicole Neumann– dejó Uruguay y se mudó a Buenos Aires, donde comenzó una carrera en la agencia de Pancho Dotto e hizo algo más que sorprendió a quienes la conocían: estudió periodismo. Fresca y espontánea, pronto se hizo un lugar como conductora de Fútbol para Todos, en Fox Sports, y panelista en Intratables y Desayuno Americano. Su paso por la televisión no terminó, sin embargo, como esperaba: “Bailando por un Sueño fue la peor experiencia de mi vida, por cómo me trataron. Me di cuenta de que todo era una gran farsa, me sentí muy mal y ahí decidí apartarme de la tele”, asegura. Vivió unos años en los Estados Unidos, donde retomó su carrera como modelo, pero una vez más dejó todo para volver a Buenos Aires, esta vez por amor: privilegió su relación con el DJ Manuel Desrets (34), con quien espera su primer hijo, Lio. “Lo conocí en Punta del Este en 2017, durante unas vacaciones. Ahí empezó a suceder algo, había una energía. Yo me volví a Nueva York y estuvimos separados seis meses, aunque seguíamos hablando, y él me vino a visitar. Vivimos juntos un año en España y nos separamos en 2019 porque él quería vivir en Barcelona, y yo en Madrid. Nuestras vidas iban por diferentes caminos”, cuenta Vitto.
-Parecía un amor destinado a no prosperar, pero ahora están juntos. ¿Quién dio el primer paso para el reencuentro?
-Fue él, me llamó una Navidad, después de la pandemia. Hacía un año que no hablábamos. Yo lo quería un montón y sabía que era buena persona. Siento que ambos hicimos nuestros procesos, y cuando nos reencontramos, volvió a suceder el amor. Cortar fue lo más maravilloso que le pasó a nuestra pareja, porque puse todas mis condiciones antes de volver [Se ríe]. Había un miedito mío, porque me decía a mí misma “Este es DJ, mmm. ¿En qué andará?”. Y acá estamos, felices juntos y por tener un bebé.
-Cuando empezaste a salir con él, hubo una polémica porque él había sido novio de Silvina Luna, quien fue amiga tuya. ¿Cómo fue?
-La historia estuvo mal contada. Nadie quiere estar con el exnovio de una amiga. Silvi y yo nunca fuimos mejores amigas, ella era una amiga de mi grupo. Y tampoco hubo una pelea entre nosotras, simplemente la relación se cortó cuando me fui a Nueva York. Después conocí a Manu, y dio la casualidad de que era su ex. Fue algo que pasó, no lo elegí.
-¿Pudiste tener una charla con ella?
-Sí. Ella había dicho que se enteró de mi relación con Manu por la tele. No tengo ningún rencor por eso, porque fue una respuesta mediática que dio, pero de las puertas hacia adentro sabemos lo que sucedió realmente. También entiendo que estuviera enojada. Cuando pasó el tiempo, nos volvimos a cruzar, charlamos y nos reímos del asunto. La última vez que la vi fue un año antes de que muriera, en el cumpleaños de una de nuestras mejores amigas. Me dolió mucho su muerte. Más allá de las discrepancias, ella era muy buena.
-Volviendo a tu amor… ¿Qué es lo que más te gusta de Manu? ¿Te lo imaginaste como padre de tu hijo?
-Yo nunca pensé en casarme ni tener hijos. Pero sí estaba segura de que si en algún momento quedaba embarazada de Manu, él iba a ser el mejor padre para mis hijos. Tiene una bondad y un corazón enormes. todas las ecografías, quiere sentir, ver, tocar, ser parte. Él siempre quiso tener hijos, mientras que yo dudaba… Pensaba que cuando decidiera ser mamá, se me iba a terminar la vida. Ahora entiendo que comienza una nueva.
-¿Cuándo fue que decidieron empezar a buscar?
-Fue loco lo que pasó. Ya el año pasado, con 37 años, empecé a pensar en que la edad biológica me corría. Dije “Voy a congelar óvulos” y me di cuenta de que era un trámite bastante hostil. Me trataron como si fuera un número, hasta que di con un médico que me hizo unos estudios que me dieron mal, tenía muy baja la hormona antimulleriana y era prácticamente estéril.
-¿Iniciaste un tratamiento?
-Fue raro. Los primeros dos días estuve mal, pero pensé que el resultado de un análisis no me iba a condicionar. En mis vacaciones dije “Cuando vuelvo, me ocupo”. Seguí mi vida como siempre y quedé embarazada de forma natural.
-¿Cuál fue la reacción de Manu?
-Uh, fui muy bruta. Él estaba en el sillón y yo le dije “Gordi, estoy embarazada”. Me dijo “¿Cómo sabés?”. Le mostré el test. Explotó de alegría, me abrazó y me dijo que quería comprar un test para hacerlo conmigo y vivir el proceso. Se va a llamar Lio, que es un nombre que eligió Manu. Me imagino con un varoncito y me hace mucha ilusión. En mi familia somos todas mujeres.
-¿Cómo te gustaría que sea el parto?
-Me encantaría que sea en el agua. Voy a elegir un parto respetado. Quiero volver a las raíces, que todo sea lo más natural posible.
Maquillaje: Irene Arcieri @irearcieri
Peinado: Cristina Cagnina para Cerini Hair @cristinacagnina
Estilismo: Juliana Blanco @whitejewels
Agradecimientos: Gone
La modelo y actriz uruguaya nos recibe en su casa y habla de la búsqueda de Lio y de las segundas oportunidades en el amor. LA NACION