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El 30 de septiembre llega la información de las cuentas de argentinos en EE.UU. y la AFIP ajusta los controles

Días atrás, la titular de la AFIP, Florencia Misrahi, mantuvo un encuentro con Danny Werfel, comisionado de la IRS -las siglas en inglés de la Internal Revenue Service- para ajustar los detalles finales del operativo que comenzará a fin de este mes. En la administración tributaria argentina confirmaron que finalmente el 30 de septiembre llegará el primer paquete de información -gracias al intercambio automático sellado a fines de 2022- con datos de las cuentas de argentinos en EE.UU.

Fuentes de la AFIP estimaron además que no ingresar al blanqueo puede costarle al contribuyente argentino más de diez veces lo que implica la multa a pagar una vez tomada la opción de sumarse al “nuevo pacto fiscal” del Gobierno.

No es casual que la información sobre el arsenal para controlar a los contribuyentes que tiene en su poder la administración tributaria y los “peligros” de no aprovechar la oportunidad comience a circular con más frecuencia en estos días, con la apertura del régimen de regularización de activos en su primera etapa. Algunos tributaristas bautizan a estas acciones comunicacionales como una “operación susto”. Es, en definitiva, una especie de inductor para los evasores argentinos, aquellos “héroes”, como calificó alguna vez en un encuentro empresario en Bariloche el presidente, Javier Milei- a quienes “fugan” los dólares del país, sobre todo, si aquellos fueron comprados en el mercado informal.

“El 30 de septiembre vamos a tener la información y nos estamos preparando para el día después”, dijeron en la AFIP. “Vamos a estar muy preparados para encontrar” lo que no ingrese al blanqueo, sugirieron en esa administración, donde contaron que ya hay 150 proyectos inmobiliarios (por unos $1000 millones) atados a la exteriorización de fondos.

Vale la aclaración. ¿Qué información tendrá disponible la AFIP de los argentinos en EE.UU.? El paquete de información contendrá la identificación de titulares de cuentas (una persona física), instituciones financieras, montos brutos de intereses, dividendos y otros ingresos de fuente americana percibidos por residentes argentinos y depositados en cuentas estadounidenses. No se especificarán saldos ni tampoco beneficiarios finales, según confirmaron fuentes oficiales.

Con relación al costo de no ingresar, en la AFIP dieron un ejemplo. Si una persona quiere blanquear un activo de US$200.000 que ingresó al patrimonio en 2019, debería pagar una multa de $5 millones. Si no ingresa y es detectado por la AFIP, la deuda asciende a $56 millones (el monto incluye capital más intereses por los períodos no prescriptos, siempre teniendo en cuenta a un contribuyente que está alcanzado por Ganancias y Bienes Personales).

Los controles de la AFIP

¿Qué mirará la AFIP y con qué herramientas espera contar para ajustar el control sobre los contribuyentes? Sobre aquellos que ingresen al blanqueo se observará primero si pueden ingresar la programa, si se canceló el impuesto, y si se declaró “todos” los bienes a exteriorizar. Se pondrá la lupa sobre si el declarante es el titular al 31 de diciembre pasado y si el valor de lo declarado es “razonable”. “¿Declaró todos los bienes ocultos?”, se preguntará poniendo el foco en la integralidad.

Entre los controles “inductivos”, la AFIP ya cuenta (”Nuestra Parte”) con acceso a las declaraciones juradas que fueron presentadas, los bienes registrables, información de los depósitos bancarios en el país y en el exterior, datos sobre inversiones, títulos públicos y privados, comprobantes emitidos y recibidos, consumos con tarjeta de crédito y débito, intereses financieros, compra y venta de autos, monedas virtuales, naves y aeronaves con matrícula nacional y extranjera, y derechos de propiedad científica, literaria o artística, industrial, los de marca de fábrica o de comercio.

Pero además, la AFIP contó que tiene luz verde para revisar los regímenes de información de Operaciones Internacionales (Ricoi), fideicomisos constituidos en el país o en el exterior, entidades administradoras de tarjeta de crédito, entidades financieras y plataformas de gestión digital y electrónica (Siter), administradores de intermediación de cuentas y billeteras virtuales, registro de sujetos vinculados, transporte de caudales, traslado de fondos, custodia o tenencia de efectivo o valores, Prefectura Naval Argentina, Administración Nacional de Aviación Civil, Dirección Nacional de los Registros del Automotor, COTI (inmobiliarios), Cetae (aeronaves), y Migraciones.

El IGA 1A (por Intergovernmental Agreement en inglés) firmado en el marco de la Foreign Account Tax Compliance Act (Fatca) no es el único acuerdo sellado por la AFIP. La administración tiene acuerdos bilaterales con 29 países, entre ellos, Mónaco y Sudáfrica, que están en la “lista gris” del GAFI. Además, hay -a través del acuerdo multilateral OCDE CRS- hay acceso a un intercambio anual de cuentas financieras con más de 100 jurisdicciones. Por último, la AFIP remarcó el acceso que brinda la Convención Multilateral OCDE para el intercambio de información tributaria con 146 países.

El encuentro de Misrahi con Werfel fue un “hito”, ya que fue la primera vez que una máxima autoridad de la AFIP es recibida personalmente por el titular del ente americano (IRS). La reunión, en la que se ultimaron detalles del Fatca, fue en Washington. “El Régimen de Regularización de Activos del gobierno de Javier Milei es el más beneficioso de la historia. Los contribuyentes tienen que aprovechar esta oportunidad, porque podrán declarar sus ahorros sin costo y, una vez que concluya, no podrán ingresar a ninguna otra iniciativa de este tipo hasta 2038″, dijo desde EE.UU. la titular de la AFIP.

El IGA1 establece un intercambio masivo de datos de contribuyentes argentinos con cuentas en el sistema financiero norteamericano al 31 de diciembre último. “El mismo permitirá identificar a los titulares de dichas cuentas, la institución financiera obligada a reportar, montos de los intereses y otros ingresos de fuente estadounidense. A partir de estos datos, la AFIP podrá realizar otros pedidos de información a requerimiento en el marco de sus acciones de control y fiscalización”, precisaron en AFIP. En esa reunión en EE.UU. también participaron, el Comisionado Adjunto, Douglas O’Donnell y Jennifer Best, Comisionada Adjunta de Grandes Empresas e Internacional. En la sede del IRS, Misrahi también se reunió con Erin Collins, responsable de la Defensoría Nacional del Contribuyente y con Barry Levine, director de Soluciones de Datos, con quien se analizó la implementación del intercambio de información.

Al blanqueo pueden adherir quienes sean residentes fiscales en el país al 31 de diciembre de 2023, tanto personas humanas como sociedades. Pueden incluirse todo tipo de bienes no declarados, tanto del país como del exterior (los activos que se declaren deben ser de titularidad, o estar en posesión, del declarante a esa fecha). La regularización requiere el pago de un impuesto especial: la alícuota del impuesto varía según la etapa en la que se decida ingresar. En la primera etapa será del 5% (hasta el 30-09-2024), en la segunda del 10% (hasta el 31-12-2024) y en la última del 15% (hasta el 31-03-2025). Los primeros US$100.000 en efectivo que se declaren serán libres de impuesto, sin importar la etapa o si se mantiene en el sistema hasta fines de 2025. La franquicia de los US$100.000 (bienes) aplicará por grupo familiar.

Existe además un “tapón fiscal” por los activos declarados vía blanqueo, y en caso de detectarse por parte de la AFIP la existencia de un bien no declarado, no se pierden los beneficios del blanqueo (hay un umbral del 10%). Quienes adquieran a este blanqueo no podrán adherir a ningún otro que se pudiera implementar hasta fin de 2038, inclusive.

Días atrás, la titular de la AFIP, Florencia Misrahi, mantuvo un encuentro con Danny Werfel, comisionado de la IRS -las siglas en inglés de la Internal Revenue Service- para ajustar los detalles finales del operativo que comenzará a fin de este mes. En la administración tributaria argentina confirmaron que finalmente el 30 de septiembre llegará el primer paquete de información -gracias al intercambio automático sellado a fines de 2022- con datos de las cuentas de argentinos en EE.UU.

Fuentes de la AFIP estimaron además que no ingresar al blanqueo puede costarle al contribuyente argentino más de diez veces lo que implica la multa a pagar una vez tomada la opción de sumarse al “nuevo pacto fiscal” del Gobierno.

No es casual que la información sobre el arsenal para controlar a los contribuyentes que tiene en su poder la administración tributaria y los “peligros” de no aprovechar la oportunidad comience a circular con más frecuencia en estos días, con la apertura del régimen de regularización de activos en su primera etapa. Algunos tributaristas bautizan a estas acciones comunicacionales como una “operación susto”. Es, en definitiva, una especie de inductor para los evasores argentinos, aquellos “héroes”, como calificó alguna vez en un encuentro empresario en Bariloche el presidente, Javier Milei- a quienes “fugan” los dólares del país, sobre todo, si aquellos fueron comprados en el mercado informal.

“El 30 de septiembre vamos a tener la información y nos estamos preparando para el día después”, dijeron en la AFIP. “Vamos a estar muy preparados para encontrar” lo que no ingrese al blanqueo, sugirieron en esa administración, donde contaron que ya hay 150 proyectos inmobiliarios (por unos $1000 millones) atados a la exteriorización de fondos.

Vale la aclaración. ¿Qué información tendrá disponible la AFIP de los argentinos en EE.UU.? El paquete de información contendrá la identificación de titulares de cuentas (una persona física), instituciones financieras, montos brutos de intereses, dividendos y otros ingresos de fuente americana percibidos por residentes argentinos y depositados en cuentas estadounidenses. No se especificarán saldos ni tampoco beneficiarios finales, según confirmaron fuentes oficiales.

Con relación al costo de no ingresar, en la AFIP dieron un ejemplo. Si una persona quiere blanquear un activo de US$200.000 que ingresó al patrimonio en 2019, debería pagar una multa de $5 millones. Si no ingresa y es detectado por la AFIP, la deuda asciende a $56 millones (el monto incluye capital más intereses por los períodos no prescriptos, siempre teniendo en cuenta a un contribuyente que está alcanzado por Ganancias y Bienes Personales).

Los controles de la AFIP

¿Qué mirará la AFIP y con qué herramientas espera contar para ajustar el control sobre los contribuyentes? Sobre aquellos que ingresen al blanqueo se observará primero si pueden ingresar la programa, si se canceló el impuesto, y si se declaró “todos” los bienes a exteriorizar. Se pondrá la lupa sobre si el declarante es el titular al 31 de diciembre pasado y si el valor de lo declarado es “razonable”. “¿Declaró todos los bienes ocultos?”, se preguntará poniendo el foco en la integralidad.

Entre los controles “inductivos”, la AFIP ya cuenta (”Nuestra Parte”) con acceso a las declaraciones juradas que fueron presentadas, los bienes registrables, información de los depósitos bancarios en el país y en el exterior, datos sobre inversiones, títulos públicos y privados, comprobantes emitidos y recibidos, consumos con tarjeta de crédito y débito, intereses financieros, compra y venta de autos, monedas virtuales, naves y aeronaves con matrícula nacional y extranjera, y derechos de propiedad científica, literaria o artística, industrial, los de marca de fábrica o de comercio.

Pero además, la AFIP contó que tiene luz verde para revisar los regímenes de información de Operaciones Internacionales (Ricoi), fideicomisos constituidos en el país o en el exterior, entidades administradoras de tarjeta de crédito, entidades financieras y plataformas de gestión digital y electrónica (Siter), administradores de intermediación de cuentas y billeteras virtuales, registro de sujetos vinculados, transporte de caudales, traslado de fondos, custodia o tenencia de efectivo o valores, Prefectura Naval Argentina, Administración Nacional de Aviación Civil, Dirección Nacional de los Registros del Automotor, COTI (inmobiliarios), Cetae (aeronaves), y Migraciones.

El IGA 1A (por Intergovernmental Agreement en inglés) firmado en el marco de la Foreign Account Tax Compliance Act (Fatca) no es el único acuerdo sellado por la AFIP. La administración tiene acuerdos bilaterales con 29 países, entre ellos, Mónaco y Sudáfrica, que están en la “lista gris” del GAFI. Además, hay -a través del acuerdo multilateral OCDE CRS- hay acceso a un intercambio anual de cuentas financieras con más de 100 jurisdicciones. Por último, la AFIP remarcó el acceso que brinda la Convención Multilateral OCDE para el intercambio de información tributaria con 146 países.

El encuentro de Misrahi con Werfel fue un “hito”, ya que fue la primera vez que una máxima autoridad de la AFIP es recibida personalmente por el titular del ente americano (IRS). La reunión, en la que se ultimaron detalles del Fatca, fue en Washington. “El Régimen de Regularización de Activos del gobierno de Javier Milei es el más beneficioso de la historia. Los contribuyentes tienen que aprovechar esta oportunidad, porque podrán declarar sus ahorros sin costo y, una vez que concluya, no podrán ingresar a ninguna otra iniciativa de este tipo hasta 2038″, dijo desde EE.UU. la titular de la AFIP.

El IGA1 establece un intercambio masivo de datos de contribuyentes argentinos con cuentas en el sistema financiero norteamericano al 31 de diciembre último. “El mismo permitirá identificar a los titulares de dichas cuentas, la institución financiera obligada a reportar, montos de los intereses y otros ingresos de fuente estadounidense. A partir de estos datos, la AFIP podrá realizar otros pedidos de información a requerimiento en el marco de sus acciones de control y fiscalización”, precisaron en AFIP. En esa reunión en EE.UU. también participaron, el Comisionado Adjunto, Douglas O’Donnell y Jennifer Best, Comisionada Adjunta de Grandes Empresas e Internacional. En la sede del IRS, Misrahi también se reunió con Erin Collins, responsable de la Defensoría Nacional del Contribuyente y con Barry Levine, director de Soluciones de Datos, con quien se analizó la implementación del intercambio de información.

Al blanqueo pueden adherir quienes sean residentes fiscales en el país al 31 de diciembre de 2023, tanto personas humanas como sociedades. Pueden incluirse todo tipo de bienes no declarados, tanto del país como del exterior (los activos que se declaren deben ser de titularidad, o estar en posesión, del declarante a esa fecha). La regularización requiere el pago de un impuesto especial: la alícuota del impuesto varía según la etapa en la que se decida ingresar. En la primera etapa será del 5% (hasta el 30-09-2024), en la segunda del 10% (hasta el 31-12-2024) y en la última del 15% (hasta el 31-03-2025). Los primeros US$100.000 en efectivo que se declaren serán libres de impuesto, sin importar la etapa o si se mantiene en el sistema hasta fines de 2025. La franquicia de los US$100.000 (bienes) aplicará por grupo familiar.

Existe además un “tapón fiscal” por los activos declarados vía blanqueo, y en caso de detectarse por parte de la AFIP la existencia de un bien no declarado, no se pierden los beneficios del blanqueo (hay un umbral del 10%). Quienes adquieran a este blanqueo no podrán adherir a ningún otro que se pudiera implementar hasta fin de 2038, inclusive.

 La titular de la AFIP, Florencia Misrahi, se reunió días atrás con el director de la IRS; esperan esa información fresca para sumarla a los controles con los que ya cuenta la administración; cuál es el costo de no blanquear  LA NACION

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