Presupuesto: para los economistas, el Presidente dio un mensaje político, pero aún resta ver cómo cierran los números
Después de que el presidente Javier Milei presentara el proyecto de ley de presupuesto con un fuerte énfasis en el blindaje fiscal que propone su Gobierno al considerar al déficit la madre de todos los problemas argentinos de los últimos 100 años, distintos economistas señalaron algunas inconsistencias en las proyecciones, por lo que resaltaron más que nada la férrea voluntad de equilibrio fiscal.
“Las proyecciones macro no cierran con las proyecciones de ingresos tributarios. Claramente, no hay proyecciones de composición del gasto, con lo cual tenés una declaración política de equilibrio fiscal, venga lo que se venga y cómo se va a lograr eso vaya a saber Dios. Haciendo lo que sea necesario hacer, no mucho más, porque los números que acaban de publicar son inconsistentes”, dijo Gabriel Caamaño, socio de la consultora Ledesma.
En su cuenta de la red social X, cuestionó, por ejemplo, que no cierra cómo se va a duplicar en pesos la recaudación de derechos de exportación con las proyecciones de crecimiento de valores exportados en dólares (US$104.030 millones) y las proyecciones de tipo de cambio ($1207). “Así hay varias más. La suba de impuesto a los combustibles también es muy fuerte (155,4%). Sin una explicación muy buena no cierran y las explicaciones muy buenas no están”, cerró.
Alguien que me explique cómo con esas proyecciones macro de crecimiento de valores exportados en usd y con esas proyecciones de tipo de cambio se va a duplicar en pesos la recaudación de derechos de exportación. pic.twitter.com/M5PoBB8bWA
— Gabriel Caamaño (@GabCaamano) September 16, 2024
En tanto, Amilcar Collante, fundador del Centro de Estudios Económicos del Sur (Cesur), coincidió en esta visión y habló de inconsistencia fuerte por el lado de los ingresos fiscales. “Los derechos de exportación ($10.712.570 millones) están sobreestimados si lo ajustamos a las proyecciones del propio documento. Es muy fuerte lo del impuesto a los combustibles. Creo que continúa el ancla fiscal, pero sin claridad sobre el cómo. Algo parecido a 2024″, opinó.
18% de inflacion punta a punta no encaja con esta proyección de ingresos https://t.co/KTtLDMoRHs
— Amilcar Collante (@AmilcarCollante) September 16, 2024
“Lo del monotributo con esa suba (según lo presentado la recaudación tendría una variación interanual del 196%) me parece también muy importante siempre considerando una nominalidad que tiene un 18,3% de inflación punta a punta. Por esas inconsistencias, no hay jugo para sacarle a los números. Creo que se apuntala la decisión de que el ancla fiscal no se modificará”, continuó.
Por su parte, el director de Análisis Macroeconómico de la consultora Equilibra, Lorenzo Sigaut Gravina, también señaló que los supuestos son muy exigentes, ya que ve más movimiento cambiario y más inflación. “La proyección de inflación equivale a una tasa promedio mensual del 1,4% cuando ahora al Gobierno le cuesta mucho bajar del 4% y hay que ver cómo hace para mover muy poco el tipo de cambio oficial en un año electoral. Esa nominalidad indica que el gobierno no solo sigue con el crawling peg del 2% mensual, sino que después tendría que ir moviendo el tipo de cambio al 1% mensual”, detalló.
Por último, Fernando Marull, socio de FMyA, consideró que lo que se plantea es el mismo superávit fiscal de este año y que es alcanzable. En cuanto a las proyecciones macro dijo que lo que están diciendo es que continúa el crawling peg y que eventualmente la inflación va a ir bajando y ahí bajarán el crawling peg al 1,3% mensual. Por otro lado, agregó que hablan de un superávit comercial muy alto y que eso permite financiar la deuda, así que no van a salir del cepo cambiario.
En este sentido, analizó que no habrá mucho impacto en los mercados, salvo por el mensaje de ahorro fiscal que es lo más positivo junto con la eliminación del impuesto PAIS.
Reacciones empresarias
Entre los empresarios el mensaje de orden en las cuentas públicas fue muy bien recepcionado. “En un país marcado por el déficit fiscal crónico, la defensa a ultranza del equilibrio en las cuentas públicas que lidera el primer mandatario es muy saludable. Y también lo es el objetivo de bajar el gasto y la presión impositiva que tiene en contrapartida, que en las últimas décadas alcanzaron niveles a todas luces excesivos”, sostuvo el titular de la Cámara Argentina del Comercio (CAC), Mario Grinman.
“Apenas asumió en diciembre, Milei encaró un ajuste que sorprendió a muchos, tanto por la velocidad como por la magnitud. Desde luego que varias de las medidas no estuvieron exentas de costos, pero eran imprescindibles para ordenar una macroeconomía insostenible y evitar males mayores”, agregó el presidente de la CAC.
Por su parte, el presidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro), Elbio Laucirica, dijo a LA NACION que “si bien no hubo anuncios específicos para el sector, se ratificó un rumbo de gobierno basado en el equilibrio fiscal y en un Estado abocado a sus funciones específicas, evitando gastos innecesarios para mantener la política partidaria y en muchos casos, la corrupción y que el Estado no interfiera en los procesos económicos que no le competen”.
Por último, Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), dijo que el discurso fue “una ratificación de la política fiscal y monetaria de este gobierno” que avalan y apoyan plenamente, si bien falta un tipo de cambio unificado, la eliminación del cepo y de todas las restricciones que aplica el Banco Central que fueron heredadas.
“Sin superávit fiscal no podemos recuperar la economía, pero ahora tenemos que trabajar en lograr un superávit comercial a través de un fuerte crecimiento exportador con valor agregado”, opinó.
Después de que el presidente Javier Milei presentara el proyecto de ley de presupuesto con un fuerte énfasis en el blindaje fiscal que propone su Gobierno al considerar al déficit la madre de todos los problemas argentinos de los últimos 100 años, distintos economistas señalaron algunas inconsistencias en las proyecciones, por lo que resaltaron más que nada la férrea voluntad de equilibrio fiscal.
“Las proyecciones macro no cierran con las proyecciones de ingresos tributarios. Claramente, no hay proyecciones de composición del gasto, con lo cual tenés una declaración política de equilibrio fiscal, venga lo que se venga y cómo se va a lograr eso vaya a saber Dios. Haciendo lo que sea necesario hacer, no mucho más, porque los números que acaban de publicar son inconsistentes”, dijo Gabriel Caamaño, socio de la consultora Ledesma.
En su cuenta de la red social X, cuestionó, por ejemplo, que no cierra cómo se va a duplicar en pesos la recaudación de derechos de exportación con las proyecciones de crecimiento de valores exportados en dólares (US$104.030 millones) y las proyecciones de tipo de cambio ($1207). “Así hay varias más. La suba de impuesto a los combustibles también es muy fuerte (155,4%). Sin una explicación muy buena no cierran y las explicaciones muy buenas no están”, cerró.
Alguien que me explique cómo con esas proyecciones macro de crecimiento de valores exportados en usd y con esas proyecciones de tipo de cambio se va a duplicar en pesos la recaudación de derechos de exportación. pic.twitter.com/M5PoBB8bWA
— Gabriel Caamaño (@GabCaamano) September 16, 2024
En tanto, Amilcar Collante, fundador del Centro de Estudios Económicos del Sur (Cesur), coincidió en esta visión y habló de inconsistencia fuerte por el lado de los ingresos fiscales. “Los derechos de exportación ($10.712.570 millones) están sobreestimados si lo ajustamos a las proyecciones del propio documento. Es muy fuerte lo del impuesto a los combustibles. Creo que continúa el ancla fiscal, pero sin claridad sobre el cómo. Algo parecido a 2024″, opinó.
18% de inflacion punta a punta no encaja con esta proyección de ingresos https://t.co/KTtLDMoRHs
— Amilcar Collante (@AmilcarCollante) September 16, 2024
“Lo del monotributo con esa suba (según lo presentado la recaudación tendría una variación interanual del 196%) me parece también muy importante siempre considerando una nominalidad que tiene un 18,3% de inflación punta a punta. Por esas inconsistencias, no hay jugo para sacarle a los números. Creo que se apuntala la decisión de que el ancla fiscal no se modificará”, continuó.
Por su parte, el director de Análisis Macroeconómico de la consultora Equilibra, Lorenzo Sigaut Gravina, también señaló que los supuestos son muy exigentes, ya que ve más movimiento cambiario y más inflación. “La proyección de inflación equivale a una tasa promedio mensual del 1,4% cuando ahora al Gobierno le cuesta mucho bajar del 4% y hay que ver cómo hace para mover muy poco el tipo de cambio oficial en un año electoral. Esa nominalidad indica que el gobierno no solo sigue con el crawling peg del 2% mensual, sino que después tendría que ir moviendo el tipo de cambio al 1% mensual”, detalló.
Por último, Fernando Marull, socio de FMyA, consideró que lo que se plantea es el mismo superávit fiscal de este año y que es alcanzable. En cuanto a las proyecciones macro dijo que lo que están diciendo es que continúa el crawling peg y que eventualmente la inflación va a ir bajando y ahí bajarán el crawling peg al 1,3% mensual. Por otro lado, agregó que hablan de un superávit comercial muy alto y que eso permite financiar la deuda, así que no van a salir del cepo cambiario.
En este sentido, analizó que no habrá mucho impacto en los mercados, salvo por el mensaje de ahorro fiscal que es lo más positivo junto con la eliminación del impuesto PAIS.
Reacciones empresarias
Entre los empresarios el mensaje de orden en las cuentas públicas fue muy bien recepcionado. “En un país marcado por el déficit fiscal crónico, la defensa a ultranza del equilibrio en las cuentas públicas que lidera el primer mandatario es muy saludable. Y también lo es el objetivo de bajar el gasto y la presión impositiva que tiene en contrapartida, que en las últimas décadas alcanzaron niveles a todas luces excesivos”, sostuvo el titular de la Cámara Argentina del Comercio (CAC), Mario Grinman.
“Apenas asumió en diciembre, Milei encaró un ajuste que sorprendió a muchos, tanto por la velocidad como por la magnitud. Desde luego que varias de las medidas no estuvieron exentas de costos, pero eran imprescindibles para ordenar una macroeconomía insostenible y evitar males mayores”, agregó el presidente de la CAC.
Por su parte, el presidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro), Elbio Laucirica, dijo a LA NACION que “si bien no hubo anuncios específicos para el sector, se ratificó un rumbo de gobierno basado en el equilibrio fiscal y en un Estado abocado a sus funciones específicas, evitando gastos innecesarios para mantener la política partidaria y en muchos casos, la corrupción y que el Estado no interfiera en los procesos económicos que no le competen”.
Por último, Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), dijo que el discurso fue “una ratificación de la política fiscal y monetaria de este gobierno” que avalan y apoyan plenamente, si bien falta un tipo de cambio unificado, la eliminación del cepo y de todas las restricciones que aplica el Banco Central que fueron heredadas.
“Sin superávit fiscal no podemos recuperar la economía, pero ahora tenemos que trabajar en lograr un superávit comercial a través de un fuerte crecimiento exportador con valor agregado”, opinó.
Algunos cuestionaron las proyecciones económicas que se conocieron, pero resaltaron que se apuntala la decisión de que el ancla fiscal no se modificará LA NACION