La salud de Jorge Lanata: el periodista fue sometido a una nueva intervención quirúrgica
El público sigue muy de cerca el paso a paso en la internación de Jorge Lanata, y cuáles son las novedades diarias. Y según pudo confirmar LA NACIÓN, el periodista fue sometido a una nueva intervención quirúrgica duranta la tarde del viernes, que fue realizada de manera exitosa.
En el transcurso de las últimas horas, a Lanata se le colocó un botón gástrico, un paso que debía ser realizado para garantizar su correcta nutrición, y de esa manera favorecer su posterior tratamiento de rehabilitación. Según lo estipulado hasta el momento, la intención es trasladar al periodista a la clínica Santa Catalina, en el transcurso de la semana que viene.
El día miércoles por la mañana, Elba Marcovecchio, su mujer, había explicado que junto con los médicos estaban evaluando la posibilidad del traslado y se mostró confiada gracias a los avances en el estado de salud del periodista: contó que estaba bien y que seguía evolucionando de manera favorable. “A mí se me nota todo en la cara. Yo estoy muy esperanzada, muy optimista y la verdad es que estamos esperando este traslado para empezar la nueva etapa”, confesó, y entró rápidamente al Hospital para volver a encontrarse con su esposo.
Una extensa internación
El conductor de Lanata sin filtro y Periodismo para todos se encuentra internado desde el 14 de junio, cuando llegó al Hospital Italiano con el objetivo de someterse a un estudio de rutina. En medio del procedimiento, sufrió una complicación y fue trasladado a la terapia intensiva, donde estuvo los siguientes tres meses, hasta que fue trasladado al centro de rehabilitación Santa Catalina, en el barrio porteño de San Cristóbal.
Pero Lanata volvió al Hospital Italiano pocos días después, en septiembre, cuando sufrió una neumonía y un cuadro febril, siempre con recuperaciones paulatinas. Sin embargo, pocos días después su cuadro empeoró drásticamente y debió ingresar cuatro veces al quirófano como consecuencia de una isquemia intestinal: le sacaron 70 centímetros del órgano y recién el miércoles 16 de octubre los profesionales del centro médico pudieron volver a unir su intestino.
Una esperada recuperación
Las noticias sobre la salud del periodista que trascendieron durante los últimos días llevaron aliento a su familia. “Está mejor, está hablando. Obviamente que está medio perdido y confundido por momentos, pero está bien”, había dicho Bárbara a LA NACIÓN el lunes pasado. “Lo sientan un rato todas las mañanas. Esta semana van a empezar a evaluar el traslado”, había agregado la joven, dando cuenta de que el conductor de Lanata sin filtro se encuentra estabilizado y en condiciones de dar un paso más en su camino hacia la rehabilitación.
Sin partes médicos oficiales desde mediados de octubre, las novedades acerca de la salud de Lanata son difundidas por su círculo cercano. Así, tras las cuatro intervenciones quirúrgicas a las que fue sometido para tratar una isquemia intestinal, se supo que en los últimos días le pudieron retirar una de las vías con que se alimentaba y ahora, únicamente lo hace por vía nasogástrica. Además, el periodista pasa más tiempo despierto durante el día y en contacto con su entorno. Recibe más visitas, que le hablan, y él reacciona a esa interacción; también se le colocó una válvula fonatoria que le permitió comenzar a vocalizar.
Con la colaboración de Nieves Otero
El público sigue muy de cerca el paso a paso en la internación de Jorge Lanata, y cuáles son las novedades diarias. Y según pudo confirmar LA NACIÓN, el periodista fue sometido a una nueva intervención quirúrgica duranta la tarde del viernes, que fue realizada de manera exitosa.
En el transcurso de las últimas horas, a Lanata se le colocó un botón gástrico, un paso que debía ser realizado para garantizar su correcta nutrición, y de esa manera favorecer su posterior tratamiento de rehabilitación. Según lo estipulado hasta el momento, la intención es trasladar al periodista a la clínica Santa Catalina, en el transcurso de la semana que viene.
El día miércoles por la mañana, Elba Marcovecchio, su mujer, había explicado que junto con los médicos estaban evaluando la posibilidad del traslado y se mostró confiada gracias a los avances en el estado de salud del periodista: contó que estaba bien y que seguía evolucionando de manera favorable. “A mí se me nota todo en la cara. Yo estoy muy esperanzada, muy optimista y la verdad es que estamos esperando este traslado para empezar la nueva etapa”, confesó, y entró rápidamente al Hospital para volver a encontrarse con su esposo.
Una extensa internación
El conductor de Lanata sin filtro y Periodismo para todos se encuentra internado desde el 14 de junio, cuando llegó al Hospital Italiano con el objetivo de someterse a un estudio de rutina. En medio del procedimiento, sufrió una complicación y fue trasladado a la terapia intensiva, donde estuvo los siguientes tres meses, hasta que fue trasladado al centro de rehabilitación Santa Catalina, en el barrio porteño de San Cristóbal.
Pero Lanata volvió al Hospital Italiano pocos días después, en septiembre, cuando sufrió una neumonía y un cuadro febril, siempre con recuperaciones paulatinas. Sin embargo, pocos días después su cuadro empeoró drásticamente y debió ingresar cuatro veces al quirófano como consecuencia de una isquemia intestinal: le sacaron 70 centímetros del órgano y recién el miércoles 16 de octubre los profesionales del centro médico pudieron volver a unir su intestino.
Una esperada recuperación
Las noticias sobre la salud del periodista que trascendieron durante los últimos días llevaron aliento a su familia. “Está mejor, está hablando. Obviamente que está medio perdido y confundido por momentos, pero está bien”, había dicho Bárbara a LA NACIÓN el lunes pasado. “Lo sientan un rato todas las mañanas. Esta semana van a empezar a evaluar el traslado”, había agregado la joven, dando cuenta de que el conductor de Lanata sin filtro se encuentra estabilizado y en condiciones de dar un paso más en su camino hacia la rehabilitación.
Sin partes médicos oficiales desde mediados de octubre, las novedades acerca de la salud de Lanata son difundidas por su círculo cercano. Así, tras las cuatro intervenciones quirúrgicas a las que fue sometido para tratar una isquemia intestinal, se supo que en los últimos días le pudieron retirar una de las vías con que se alimentaba y ahora, únicamente lo hace por vía nasogástrica. Además, el periodista pasa más tiempo despierto durante el día y en contacto con su entorno. Recibe más visitas, que le hablan, y él reacciona a esa interacción; también se le colocó una válvula fonatoria que le permitió comenzar a vocalizar.
Con la colaboración de Nieves Otero
En el marco de su internación, el conductor de Periodismo para todos se sometió a una cirugía que se realizó con éxito durante la tarde del viernes LA NACION