La Hache se recuperó del golpazo ante los Heguy, volvió a ponerse en carrera y ahora sueña con bajar al campeón
Sin hoy, no había mañana para La Hache. Este sábado le ganó 15-10 a La Hache Cría & Polo y aguarda por un mañana venturoso (el sábado próximo), ante La Natividad. Ocasión en la cual, Hilario Ulloa y compañía, también deberán imponerse para cumplir con el objetivo trazado luego de coronarse en el Abierto de Tortugas, su primer podio: estar en la gran final del 7 de diciembre.
Últimamente, La Hache venía de grito en grito. De festejo en Tortugas y con un semblante alegre, como consecuencia de la goleada sobre La Aguada (22-12), en el debut palermitano. Se cruzó con Indios Chapaleufú en el camino y una repentina disfonía se presentó inesperadamente. Chapaleufú le tapó la boca, no lo dejó hablar, y La Hache enmudeció. Por eso, en esta jornada no tenía otra alternativa que retirarse victorioso de la cancha 2. Y lo hizo.
Recuperó la actitud de Tortugas, el poder de gol y cierto orden de aquella definición con Ellerstina. No pasó sobresaltos, no se sintió apremiado, y su juego resurgió en algunos pasajes. Tampoco encandiló de tanto brillo. Pero jugó mucho más parecido a lo que puede jugar -y ha jugado- que a la descolorida imagen ofrecida hace siete días antes. Volvió Tomás Panelo, recuperado de un golpe, y gracias a su buena ubicación, visión de juego, claridad para salir del campo propio y oportunismo para irse al ataque sorpresivamente, resolvió algunos problemas y La Hache volvió a gritar fuerte en Palermo.
La Hache Cría & Polo, un equipo incómodo, batallador, fue superado en todos los aspectos del juego, incluso en la caballada. Pareció que, mentalmente, ambos La Hache estaban sintonizando distintas frecuencias: la mayor, muy enfocado en seguir en la pelea por el premio grande, y la menor, algo distendido, con el propósito de mantenerse en la siguiente Triple Corona, casi, casi cumplido (salvo una rara combinación de resultados que lo obligue a jugar el repechaje contra el campeón de la Copa Cámara de Diputados). Esta caída cerró su actuación de 2024: disputó ocho partidos, perdió seis y ganó dos. Las dos victorias las obtuvo en Palermo, que es donde mejor se cotizan.
Se midieron las dos La Hache. Una se fue silbando bajito; la otra, recuperando un poco la voz, para volver a gritar fuerte el sábado que viene. Como una final.
La Hache 15 vs. La Hache Cría y Polo 10
La Hache: Pablo Pieres (h.), 9; Hilario Ulloa, 9; Francisco Elizalde, 9, y Tomás Panelo, 9. Total: 36.La Hache Cría & Polo: Facundo Sola, 8; Carlos María Ulloa, 8; Benjamín Panelo, 7, y Joaquín Pittaluga, 8. Total: 31.Progresión: La Hache: 2-1. 5-2, 7-3, 9-4, 11-5, 12-6, 13-8 y 15-10.Goleadores de La Hache: Pieres (h.), 9 (dos penales); H. Ulloa, 1; Elizalde, 2, y T. Panelo, 3.Goleadores de La Hache Cría & Polo: Sola, 5; C. M. Ulloa, 1; B. Panelo, 2, y Pittaluga, 2.Incidencias: Amonestado C. Ulloa (LH C&P) en el quinto chukker.Jueces: Guillermo Villanueva (h.) y Martín Pascual.Árbitro: Martín Aguerre.Cancha: 2 de Palermo.
La Natividad ante Indios Chapaleufú
En el segundo encuentro de la jornada, por la Zona A, La Natividad, defensor del título y ganador de sus dos primeros partidos, se mide desde las 17 con Indios Chapaleufú, el equipo de menor promedio de edad del torneo más importante del mundo y que viene de dar un golpe resonante frente a La Hache. El conjunto de los primos Heguy (Cruz y Antonio), tiene una victoria y una derrota. Ya se enfrentaron en la apertura del Abierto de Tortugas, con victoria clara del conjunto de los hermanos Castagnola por 25-4.
La Natividad: Camilo Castagnola 10, Facundo Pieres 10, Pablo Mac Donough 10 y Bartolomé Castagnola (h) 10. Total: 40.Indios Chapaleufú: Antonio Heguy 7, Victorino Ruiz Jorba 8, Cruz Heguy 8 y Teodoro Lacau 8. Total: 31.Jueces: Guillermo Villanueva (h) y Gonzalo López Vargas. Árbitro: José I. Araya.
Sin hoy, no había mañana para La Hache. Este sábado le ganó 15-10 a La Hache Cría & Polo y aguarda por un mañana venturoso (el sábado próximo), ante La Natividad. Ocasión en la cual, Hilario Ulloa y compañía, también deberán imponerse para cumplir con el objetivo trazado luego de coronarse en el Abierto de Tortugas, su primer podio: estar en la gran final del 7 de diciembre.
Últimamente, La Hache venía de grito en grito. De festejo en Tortugas y con un semblante alegre, como consecuencia de la goleada sobre La Aguada (22-12), en el debut palermitano. Se cruzó con Indios Chapaleufú en el camino y una repentina disfonía se presentó inesperadamente. Chapaleufú le tapó la boca, no lo dejó hablar, y La Hache enmudeció. Por eso, en esta jornada no tenía otra alternativa que retirarse victorioso de la cancha 2. Y lo hizo.
Recuperó la actitud de Tortugas, el poder de gol y cierto orden de aquella definición con Ellerstina. No pasó sobresaltos, no se sintió apremiado, y su juego resurgió en algunos pasajes. Tampoco encandiló de tanto brillo. Pero jugó mucho más parecido a lo que puede jugar -y ha jugado- que a la descolorida imagen ofrecida hace siete días antes. Volvió Tomás Panelo, recuperado de un golpe, y gracias a su buena ubicación, visión de juego, claridad para salir del campo propio y oportunismo para irse al ataque sorpresivamente, resolvió algunos problemas y La Hache volvió a gritar fuerte en Palermo.
La Hache Cría & Polo, un equipo incómodo, batallador, fue superado en todos los aspectos del juego, incluso en la caballada. Pareció que, mentalmente, ambos La Hache estaban sintonizando distintas frecuencias: la mayor, muy enfocado en seguir en la pelea por el premio grande, y la menor, algo distendido, con el propósito de mantenerse en la siguiente Triple Corona, casi, casi cumplido (salvo una rara combinación de resultados que lo obligue a jugar el repechaje contra el campeón de la Copa Cámara de Diputados). Esta caída cerró su actuación de 2024: disputó ocho partidos, perdió seis y ganó dos. Las dos victorias las obtuvo en Palermo, que es donde mejor se cotizan.
Se midieron las dos La Hache. Una se fue silbando bajito; la otra, recuperando un poco la voz, para volver a gritar fuerte el sábado que viene. Como una final.
La Hache 15 vs. La Hache Cría y Polo 10
La Hache: Pablo Pieres (h.), 9; Hilario Ulloa, 9; Francisco Elizalde, 9, y Tomás Panelo, 9. Total: 36.La Hache Cría & Polo: Facundo Sola, 8; Carlos María Ulloa, 8; Benjamín Panelo, 7, y Joaquín Pittaluga, 8. Total: 31.Progresión: La Hache: 2-1. 5-2, 7-3, 9-4, 11-5, 12-6, 13-8 y 15-10.Goleadores de La Hache: Pieres (h.), 9 (dos penales); H. Ulloa, 1; Elizalde, 2, y T. Panelo, 3.Goleadores de La Hache Cría & Polo: Sola, 5; C. M. Ulloa, 1; B. Panelo, 2, y Pittaluga, 2.Incidencias: Amonestado C. Ulloa (LH C&P) en el quinto chukker.Jueces: Guillermo Villanueva (h.) y Martín Pascual.Árbitro: Martín Aguerre.Cancha: 2 de Palermo.
La Natividad ante Indios Chapaleufú
En el segundo encuentro de la jornada, por la Zona A, La Natividad, defensor del título y ganador de sus dos primeros partidos, se mide desde las 17 con Indios Chapaleufú, el equipo de menor promedio de edad del torneo más importante del mundo y que viene de dar un golpe resonante frente a La Hache. El conjunto de los primos Heguy (Cruz y Antonio), tiene una victoria y una derrota. Ya se enfrentaron en la apertura del Abierto de Tortugas, con victoria clara del conjunto de los hermanos Castagnola por 25-4.
La Natividad: Camilo Castagnola 10, Facundo Pieres 10, Pablo Mac Donough 10 y Bartolomé Castagnola (h) 10. Total: 40.Indios Chapaleufú: Antonio Heguy 7, Victorino Ruiz Jorba 8, Cruz Heguy 8 y Teodoro Lacau 8. Total: 31.Jueces: Guillermo Villanueva (h) y Gonzalo López Vargas. Árbitro: José I. Araya. En el duelo de equipos de la familia Ulloa, venció a La Hache Cría & Polo por 15-10 LA NACION