Franco Colapinto en la mirada de Alex Albon, su compañero: “Es un piloto fantástico”
Una sola rispidez, al menos pública, tuvieron Alexander Albon y Franco Colapinto en los nueve grandes premios y casi cuatro meses de Fórmula 1 que compartieron como pilotos titulares de Williams. Fue aquella advertencia del tailandés por una supuesta maniobra riesgosa del argentino en la excelente largada que el número 43 hizo en la carrera de Singapur. “Franco se lanzó. ¿Qué está haciendo?”, cuestionó desde su coche apenas pasó por la parte externa la primera curva de la competencia más agotadora del año en términos de resistencia física.
Duró poco la cuestión. Al cierre del gran premio ambos miraron la acción y, en efecto, no había habido peligro alguno, y Albon se retractó. Es más: el movimiento fue el mejor en los 2100 kilómetros de carrera que recorrió Colapinto en Fórmula 1, porque con él superó a tres pilotos (Yuki Tsunoda, Carlos Sainz y el propio Alex) en pocos metros, y sin tocar ni encerrar a nadie. Ésa fue la tercera fecha del argentino en la categoría; nunca antes, y nunca después, al menos que se sepa, tuvo un entredicho con su compañero. Que ahora que terminó la temporada, habló bastante de él.
“Espero que no. No creo que lo merezca”, deseó Albon, consultado sobre si pensaba que los malos resultados de los últimos compromisos estropearían el balance final de Colapinto en su porción de campeonato afrontada. “Creo que fue a la par con el rendimiento del coche, y se volvió complicado al final de la temporada. Fue complicado para mí, también. No tuve un final de año fantástico, y no siempre me culpo a mí solamente. Así que creo que el equipo sabe lo bueno que es”, aludió, citado por el portal Motorsport, a su compañero.
Franco se estrenó en el Gran Premio de Italia, cuya carrera tuvo lugar el 1 de septiembre. Le fue mejor ese domingo, con un 12º puesto, que el sábado, cuando cosechó el 18º para largar al día siguiente. Un buen comienzo, en un autódromo conocido, Monza. “Después de quitar peso del chasis, Williams introdujo su único paquete de mejoras importante alrededor del Gran Premio de Países Bajos, antes de que retrocediera hacia el final del año. Creo que fue perfecto que Colapinto entrara cuando el coche era más competitivo, y posiblemente más fácil de conducir, en circuitos que además eran bastante agradables. Para ser justos, hizo un muy buen trabajo en Bakú y Singapur, y no eran circuitos fáciles para manejar”, comentó Albon sobre dos buenos desempeños de su compañero. En el trazado callejero de Azerbaiyán Franco resultó 8º y cosechó 4 puntos, los primeros de un argentino en 42 años en F. 1, y en el pequeño estado asiático no sumó, pero estuvo a punto de hacerlo, con una 11ª posición que, de no ser por un error del equipo –lo convocó tarde a los boxes–, habría mutado a 10ª.
Al tailandés-británico le fue mejor en esos lugares: resultó 9º (2 unidades) en Italia y 7º (6) en Bakú, aunque abandonó en Singapur. Pero en Austin Colapinto lo superó ampliamente, con un 10º (1) lugar contra un 16º. A partir de entonces, todo fue en baja. Para Franco, para Alex y para Williams en general. “Luego, es cosa de la Fórmula 1; creo que hemos retrocedido. Primero, podíamos entrar a la Q2 con una vuelta normal, pero después teníamos que hacer una gran vuelta para conseguirlo. Y eso distorsiona ligeramente [la evaluación]”, consideró el conductor del auto 23.
Que fue condescendiente con su rival interno. “Cuando todo está tan apretado, no hay margen para ser lento ni para cometer un error. Ambos hemos pasado por carreras duras, así que no culparía demasiado a Franco. Especialmente por Brasil, su primera vez en suelo mojado; no es fácil transitarlo en una pista difícil”, exoneró Albon a su compañero, que protagonizó dos choques en Interlagos, en su estreno con gomas para lluvia. Además, el ex piloto de Red Bull tuvo palabras suaves cuando admitió un error claro de Colapinto: “Después, obviamente, Las Vegas fue complicado”, aludió al choque contra un muro en la prueba de clasificación, la equivocación más ostensible del argentino en sus nueve fechas de protagonismo.
Alexander y Franco seguirán siendo compañeros en 2025, pero este último será el corredor de reserva de Williams. Durante estos cuatro meses compartieron no solamente los boxes, sino también un miniciclo de videos, de tipo streaming, en los que ambos charlaban amigablemente y se conectaban con los aficionados. Han construido un buen vínculo, al parecer. Si no lo hubiera, sería difícil que Albon cerrara su opinión sobre su contraparte con esta frase: “Es un piloto fantástico. Creo que ha mostrado su valía en la Fórmula 1. Definitivamente, cuando se unió al equipo, subestimé lo rápido que iba a ser, y creo que lo veremos en el Mundial en algún momento en el futuro”.
El último “programa” del año de Colapinto y Albon
How many carrots do they need?! 🥕
It’s 20 for 2024, as the final Team Torque for this year is now live 🤩
Watch the full episode at the link below 📲
— Williams Racing (@WilliamsRacing) December 20, 2024
Una sola rispidez, al menos pública, tuvieron Alexander Albon y Franco Colapinto en los nueve grandes premios y casi cuatro meses de Fórmula 1 que compartieron como pilotos titulares de Williams. Fue aquella advertencia del tailandés por una supuesta maniobra riesgosa del argentino en la excelente largada que el número 43 hizo en la carrera de Singapur. “Franco se lanzó. ¿Qué está haciendo?”, cuestionó desde su coche apenas pasó por la parte externa la primera curva de la competencia más agotadora del año en términos de resistencia física.
Duró poco la cuestión. Al cierre del gran premio ambos miraron la acción y, en efecto, no había habido peligro alguno, y Albon se retractó. Es más: el movimiento fue el mejor en los 2100 kilómetros de carrera que recorrió Colapinto en Fórmula 1, porque con él superó a tres pilotos (Yuki Tsunoda, Carlos Sainz y el propio Alex) en pocos metros, y sin tocar ni encerrar a nadie. Ésa fue la tercera fecha del argentino en la categoría; nunca antes, y nunca después, al menos que se sepa, tuvo un entredicho con su compañero. Que ahora que terminó la temporada, habló bastante de él.
“Espero que no. No creo que lo merezca”, deseó Albon, consultado sobre si pensaba que los malos resultados de los últimos compromisos estropearían el balance final de Colapinto en su porción de campeonato afrontada. “Creo que fue a la par con el rendimiento del coche, y se volvió complicado al final de la temporada. Fue complicado para mí, también. No tuve un final de año fantástico, y no siempre me culpo a mí solamente. Así que creo que el equipo sabe lo bueno que es”, aludió, citado por el portal Motorsport, a su compañero.
Franco se estrenó en el Gran Premio de Italia, cuya carrera tuvo lugar el 1 de septiembre. Le fue mejor ese domingo, con un 12º puesto, que el sábado, cuando cosechó el 18º para largar al día siguiente. Un buen comienzo, en un autódromo conocido, Monza. “Después de quitar peso del chasis, Williams introdujo su único paquete de mejoras importante alrededor del Gran Premio de Países Bajos, antes de que retrocediera hacia el final del año. Creo que fue perfecto que Colapinto entrara cuando el coche era más competitivo, y posiblemente más fácil de conducir, en circuitos que además eran bastante agradables. Para ser justos, hizo un muy buen trabajo en Bakú y Singapur, y no eran circuitos fáciles para manejar”, comentó Albon sobre dos buenos desempeños de su compañero. En el trazado callejero de Azerbaiyán Franco resultó 8º y cosechó 4 puntos, los primeros de un argentino en 42 años en F. 1, y en el pequeño estado asiático no sumó, pero estuvo a punto de hacerlo, con una 11ª posición que, de no ser por un error del equipo –lo convocó tarde a los boxes–, habría mutado a 10ª.
Al tailandés-británico le fue mejor en esos lugares: resultó 9º (2 unidades) en Italia y 7º (6) en Bakú, aunque abandonó en Singapur. Pero en Austin Colapinto lo superó ampliamente, con un 10º (1) lugar contra un 16º. A partir de entonces, todo fue en baja. Para Franco, para Alex y para Williams en general. “Luego, es cosa de la Fórmula 1; creo que hemos retrocedido. Primero, podíamos entrar a la Q2 con una vuelta normal, pero después teníamos que hacer una gran vuelta para conseguirlo. Y eso distorsiona ligeramente [la evaluación]”, consideró el conductor del auto 23.
Que fue condescendiente con su rival interno. “Cuando todo está tan apretado, no hay margen para ser lento ni para cometer un error. Ambos hemos pasado por carreras duras, así que no culparía demasiado a Franco. Especialmente por Brasil, su primera vez en suelo mojado; no es fácil transitarlo en una pista difícil”, exoneró Albon a su compañero, que protagonizó dos choques en Interlagos, en su estreno con gomas para lluvia. Además, el ex piloto de Red Bull tuvo palabras suaves cuando admitió un error claro de Colapinto: “Después, obviamente, Las Vegas fue complicado”, aludió al choque contra un muro en la prueba de clasificación, la equivocación más ostensible del argentino en sus nueve fechas de protagonismo.
Alexander y Franco seguirán siendo compañeros en 2025, pero este último será el corredor de reserva de Williams. Durante estos cuatro meses compartieron no solamente los boxes, sino también un miniciclo de videos, de tipo streaming, en los que ambos charlaban amigablemente y se conectaban con los aficionados. Han construido un buen vínculo, al parecer. Si no lo hubiera, sería difícil que Albon cerrara su opinión sobre su contraparte con esta frase: “Es un piloto fantástico. Creo que ha mostrado su valía en la Fórmula 1. Definitivamente, cuando se unió al equipo, subestimé lo rápido que iba a ser, y creo que lo veremos en el Mundial en algún momento en el futuro”.
El último “programa” del año de Colapinto y Albon
How many carrots do they need?! 🥕
It’s 20 for 2024, as the final Team Torque for this year is now live 🤩
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— Williams Racing (@WilliamsRacing) December 20, 2024
El tailandés-británico compartió nueve grandes premios y un ciclo de streaming con el argentino, que ahora será el piloto de reserva de Williams LA NACION
