Saladillo: abusaron a una niña de 13 años, quedó embarazada y los vecinos incendiaron la casa de una fiscal
Un grupo de vecinos de la ciudad bonaerense de Saladillo incendió la casa de la fiscal Patricia Hortel, en el marco de protestas por el abuso sexual de una niña de 13 años que quedó embarazada y dio a luz a una bebé en el Hospital Posadas. El hecho ocurrió el domingo por la noche.
Una agrupación de “autoconvocados” bajo el lema de justicia por mano propia prendió fuego cubiertas y un colchón sobre la vereda, afectando el portón de madera, aseguró un reporte policial según el medio acb Saladillo. Uno de los focos fue apagado con matafuegos de patrulleros que llegaron al lugar.
La fiscal, titular de la UFI N°1 local, no tenía relación alguna con el caso, ya que la causa por abuso está a cargo de la UFI N°2 de Roberto Javier Berlingeri. Según los medios locales, se intenta determinar si el hecho fue impulsado por una posible vendetta local o por factores externos.
La municipalidad de Saladillo publicó un comunicado oficial en sus redes sociales aclarando lo sucedido: “En base a los hechos ocurridos por el aberrante abuso sexual infantil ocurrido en nuestra ciudad; desde el Gobierno Municipal consideramos fundamental brindar claridad a la población y reafirmar nuestro compromiso con la verdad y el respeto hacia todas las partes involucradas”.
Y añadió: “La denuncia correspondiente ya ha sido presentada ante la justicia, desde el primer momento que se tomó conocimiento de la situación, especialmente ante la Unidad Funcional de Instrucción N°2 Saladillo, a cargo del Dr. Roberto Javier Berlingeri, a quien se le ha solicitado la celeridad necesaria que el caso amerita para resolver la causa y hacer justicia en defensa de una joven vulnerada”.
A su vez, se informó sobre la salud de la menor: “Desde el momento en que se presentó la denuncia formal, la joven se encuentra bajo el resguardo y la protección integral de los organismos de Niñez del Estado Municipal, garantizando su seguridad y brindándole un acompañamiento profesional y humano en esta compleja situación”.
Lo que se sabe hasta ahora del caso
El 15 de enero, una nena de 13 años ingresó a la guardia del Hospital Posadas de Saladillo debido a un dolor abdominal. Sin embargo, al ser evaluada por los médicos, se descubrió que estaba embarazada producto de un abuso sexual.
Pablo Moscatello, director del Hospital Posadas de Saladillo, indicó que acudió al hospital “acompañada por la progenitora, que la traía como que a la nena le dolía la panza, un dolor abdominal, y no sabía qué le estaba pasando”, en declaraciones televisivas.
Días después, el caso ya era conocido en la localidad y los vecinos comenzaron a organizar las primeras protestas frente a la casa de la madre de la niña. Mientras tanto, la menor había declarado que su presunto abusador sería su padrastro, un hombre de 30 años, y seguía bajo el cuidado del hospital.
El domingo, vecinos de la zona alertaron a las autoridades ver a los sospechosos “haciendo dedo” a un costado de la ruta de la ciudad Azul. Los oficiales llegaron rápidamente y ambos fueron detenidos. El padrastro, identificado como Nelson L., está acusado del delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado reiterado” y la madre de la menor, Daniela A., de “falso testimonio agravado y encubrimiento”, según precisaron fuentes policiales.
Un grupo de vecinos de la ciudad bonaerense de Saladillo incendió la casa de la fiscal Patricia Hortel, en el marco de protestas por el abuso sexual de una niña de 13 años que quedó embarazada y dio a luz a una bebé en el Hospital Posadas. El hecho ocurrió el domingo por la noche.
Una agrupación de “autoconvocados” bajo el lema de justicia por mano propia prendió fuego cubiertas y un colchón sobre la vereda, afectando el portón de madera, aseguró un reporte policial según el medio acb Saladillo. Uno de los focos fue apagado con matafuegos de patrulleros que llegaron al lugar.
La fiscal, titular de la UFI N°1 local, no tenía relación alguna con el caso, ya que la causa por abuso está a cargo de la UFI N°2 de Roberto Javier Berlingeri. Según los medios locales, se intenta determinar si el hecho fue impulsado por una posible vendetta local o por factores externos.
La municipalidad de Saladillo publicó un comunicado oficial en sus redes sociales aclarando lo sucedido: “En base a los hechos ocurridos por el aberrante abuso sexual infantil ocurrido en nuestra ciudad; desde el Gobierno Municipal consideramos fundamental brindar claridad a la población y reafirmar nuestro compromiso con la verdad y el respeto hacia todas las partes involucradas”.
Y añadió: “La denuncia correspondiente ya ha sido presentada ante la justicia, desde el primer momento que se tomó conocimiento de la situación, especialmente ante la Unidad Funcional de Instrucción N°2 Saladillo, a cargo del Dr. Roberto Javier Berlingeri, a quien se le ha solicitado la celeridad necesaria que el caso amerita para resolver la causa y hacer justicia en defensa de una joven vulnerada”.
A su vez, se informó sobre la salud de la menor: “Desde el momento en que se presentó la denuncia formal, la joven se encuentra bajo el resguardo y la protección integral de los organismos de Niñez del Estado Municipal, garantizando su seguridad y brindándole un acompañamiento profesional y humano en esta compleja situación”.
Lo que se sabe hasta ahora del caso
El 15 de enero, una nena de 13 años ingresó a la guardia del Hospital Posadas de Saladillo debido a un dolor abdominal. Sin embargo, al ser evaluada por los médicos, se descubrió que estaba embarazada producto de un abuso sexual.
Pablo Moscatello, director del Hospital Posadas de Saladillo, indicó que acudió al hospital “acompañada por la progenitora, que la traía como que a la nena le dolía la panza, un dolor abdominal, y no sabía qué le estaba pasando”, en declaraciones televisivas.
Días después, el caso ya era conocido en la localidad y los vecinos comenzaron a organizar las primeras protestas frente a la casa de la madre de la niña. Mientras tanto, la menor había declarado que su presunto abusador sería su padrastro, un hombre de 30 años, y seguía bajo el cuidado del hospital.
El domingo, vecinos de la zona alertaron a las autoridades ver a los sospechosos “haciendo dedo” a un costado de la ruta de la ciudad Azul. Los oficiales llegaron rápidamente y ambos fueron detenidos. El padrastro, identificado como Nelson L., está acusado del delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado reiterado” y la madre de la menor, Daniela A., de “falso testimonio agravado y encubrimiento”, según precisaron fuentes policiales.
Prendieron fuego cubiertas y un colchón sobre la vereda de la profesional; detuvieron al padrastro y a la madre de la menor LA NACION
