Loreley Portas. “El Presidente es una persona súper intelectual y me da una esperanza para toda la Argentina”

Este lunes, el Presidente recibió de regalo el retrato al óleo de un león, obra sin título de la artista Loreley Portas (Buenos Aires, 1982). El diseñador Roberto Piazza, invitado con su pareja, el artista Walter Vázquez, a cenar con Javier Milei y Amalia González, llevó en persona la pintura a la Quinta Presidencial de Olivos, donde luego fue colgada en la galería privada del primer mandatario junto con otros retratos pictóricos y fotográficos -entre ellos una ilustración en la que aparece como Wolverine, el personaje de Marvel que encarnó en la pantalla grande el actor Hugh Jackman– que le regalaron desde que llegó a la presidencia. La obra de Portas fue hecha en 2019.
“La idea de la obra surge a partir de mi interés en plasmar figuras de alto impacto desde un punto de vista estético y simbólico -dice Portas a LA NACION-. Me interesa mucho el retrato, tanto de animales como de personas. Cuando la pinté, se trató de una exploración sobre la conexión entre el espíritu y el plano material. Elegí el león porque es un animal que significa la fuerza, el poder, el liderazgo y la determinación. Y tiene que ver con la capacidad de concretar determinados valores. Es un animal poderoso y un arquetipo que nos recuerda lo que soñamos y traemos a la realidad”.
En actos públicos, el Presidente se presenta a sí mismo como “el león rugiente” de la canción “Panic Show”, de La Renga; “No vengo a guiar ovejas sino a despertar leones” fue uno de sus lemas de campaña.
El león del retrato tiene los ojos cerrados y el pelaje al viento. “Con una cierta libertad de ese espíritu; de libertad y de paz -describe la artista-. Y el oro que tiene bajo las garras está hablando de un suelo valioso que no es solo la Argentina sino además el mundo. Expresa un deseo para todos los hombres de bien”, dice Portas, que ha hecho retratos por encargo para otras celebridades. “Tengo mucha obra vendida en Chile, pero como son privados lo mantengo en ese ámbito -cuenta-. Muchas esposas de personas conocidas han comprado cuadros de gran formato porque la pintura viste mucho y armoniza el ambiente; la pintura te saca de la monotonía de la realidad. La gente pone una obra enfrente de un sillón, en vez de un televisor, y se sienta a contemplarla con un vino, en silencio. A Roberto [Piazza] le he regalado obra, por supuesto, a él y a Walter los considero familia”.
El óleo sobre lienzo mide 80 x 80 cm y fue enmarcado en madera lustrada y labrada, en tonos dorados antiguos. “No recibí un mensaje directo del Presidente, pero me mandó un mensajito de felicitaciones a través de Roberto y Walter. Tanto a Amalia como al Presidente la obra les encantó. Lo importante es el reconocimiento de que lo haya colgado y esté en su colección personal, en un espacio privado en Olivos. Roberto estuvo de acuerdo en hacérselo llegar como un regalo; fue una cosa impensada, de un día para el otro, pero llegó, mágicamente”, dice.
Portas, que estudió diseño gráfico y de indumentaria, está por inaugurar el espacio Buenos Aires Atelier en Palermo. “Es un nuevo espacio donde voy a poder pintar y mostrar mis obras -cuenta, entusiasmada-. Si bien no será abierto al público, vamos a hacer muestras. Voy a comunicar la apertura, prevista para marzo, en mi página web”. También es coach ontológica y bailarina.
“Me volqué de lleno a la pintura hace unos cuantos años, durante la pandemia, cuando pintaba nueve horas por día -recuerda-. Tuve buenos maestros en la Argentina y en el exterior de realismo contemporáneo y dibujo académico. Todo el estudio y la investigación lo hago sola”.
Para la artista, el presidente Milei representa la esperanza. “Lo siento un tipo intelectual, con claridad”, afirma. “Me gusta escuchar ese tipo de contenidos que comparte, como cuando escucho a otros intelectuales como Mario Sabán y Marcelo Vinzón, vinculados con la carrera de coaching. El Presidente es una persona súper intelectual y me da una esperanza para toda la Argentina, tiene una visión que viene desde otro lugar, no de la política. Apoyo esos ideales”.
Personificar el poder
Para la investigadora y ensayista Laura Malosetti Costa, la galería personal de retratos que el Presidente tiene en Olivos no es sorprendente, “en virtud de los usos que hace de su imagen desde su campaña hasta el día de hoy”, observa la autora de Retratos públicos. Pintura y fotografía en la construcción de imágenes heroicas en América Latina desde el siglo XIX.
“Su cara transfigurada por accesos de furia, la manera de mirar de abajo hacia arriba, todo eso resulta muy estudiado para producir una imagen impactante de sí mismo, por lo violenta y lo novedosa -considera-. En general, los presidentes alrededor del mundo muestran una imagen serena, que busca generar en la población una idea de solvencia y de seguridad. Parecería que este Presidente estaría buscando lo inverso: falta de control, furia, peligrosidad y cierto rasgos infantiles”.
“No hago este planteo en tono de asombro, sino en términos de reflexión -dice-. He trabajado mucho sobre la postura heroica en los retratos, el uso de las tradiciones y la manera en la que el poder se personifica a lo largo del tiempo. Se puede hacer una trayectoria de los personajes que saben que las multitudes están pendientes de sus gestos, como el ‘saludo nazi’ de Elon Musk, que tiene un referente en El juramento de los Horacios, de Jacques-Louis David. Entonces, es trascendente que esos gestos sean la peligrosidad de un león o un personaje de historieta o el loco de la motosierra o la guillotina. La guillotina fue un instrumento utilizado para hacer caer en antiguo régimen. No es una metáfora inocente”.
Para Malosetti Costa, el uso de este arsenal iconográfico explica, en parte, la popularidad que Milei tiene entre los jóvenes. “Esta idea de un presidente descontracturado, cruel, chistoso, que se parece a un personaje de cómic, estos usos que él y los que manejan sus redes hacen no tienen nada de espontáneo. Es un uso premeditado y novedoso que tenemos que tener presente y analizar en su dimensión política. Esas imágenes están teniendo su influencia”, concluye.
Este lunes, el Presidente recibió de regalo el retrato al óleo de un león, obra sin título de la artista Loreley Portas (Buenos Aires, 1982). El diseñador Roberto Piazza, invitado con su pareja, el artista Walter Vázquez, a cenar con Javier Milei y Amalia González, llevó en persona la pintura a la Quinta Presidencial de Olivos, donde luego fue colgada en la galería privada del primer mandatario junto con otros retratos pictóricos y fotográficos -entre ellos una ilustración en la que aparece como Wolverine, el personaje de Marvel que encarnó en la pantalla grande el actor Hugh Jackman– que le regalaron desde que llegó a la presidencia. La obra de Portas fue hecha en 2019.
“La idea de la obra surge a partir de mi interés en plasmar figuras de alto impacto desde un punto de vista estético y simbólico -dice Portas a LA NACION-. Me interesa mucho el retrato, tanto de animales como de personas. Cuando la pinté, se trató de una exploración sobre la conexión entre el espíritu y el plano material. Elegí el león porque es un animal que significa la fuerza, el poder, el liderazgo y la determinación. Y tiene que ver con la capacidad de concretar determinados valores. Es un animal poderoso y un arquetipo que nos recuerda lo que soñamos y traemos a la realidad”.
En actos públicos, el Presidente se presenta a sí mismo como “el león rugiente” de la canción “Panic Show”, de La Renga; “No vengo a guiar ovejas sino a despertar leones” fue uno de sus lemas de campaña.
El león del retrato tiene los ojos cerrados y el pelaje al viento. “Con una cierta libertad de ese espíritu; de libertad y de paz -describe la artista-. Y el oro que tiene bajo las garras está hablando de un suelo valioso que no es solo la Argentina sino además el mundo. Expresa un deseo para todos los hombres de bien”, dice Portas, que ha hecho retratos por encargo para otras celebridades. “Tengo mucha obra vendida en Chile, pero como son privados lo mantengo en ese ámbito -cuenta-. Muchas esposas de personas conocidas han comprado cuadros de gran formato porque la pintura viste mucho y armoniza el ambiente; la pintura te saca de la monotonía de la realidad. La gente pone una obra enfrente de un sillón, en vez de un televisor, y se sienta a contemplarla con un vino, en silencio. A Roberto [Piazza] le he regalado obra, por supuesto, a él y a Walter los considero familia”.
El óleo sobre lienzo mide 80 x 80 cm y fue enmarcado en madera lustrada y labrada, en tonos dorados antiguos. “No recibí un mensaje directo del Presidente, pero me mandó un mensajito de felicitaciones a través de Roberto y Walter. Tanto a Amalia como al Presidente la obra les encantó. Lo importante es el reconocimiento de que lo haya colgado y esté en su colección personal, en un espacio privado en Olivos. Roberto estuvo de acuerdo en hacérselo llegar como un regalo; fue una cosa impensada, de un día para el otro, pero llegó, mágicamente”, dice.
Portas, que estudió diseño gráfico y de indumentaria, está por inaugurar el espacio Buenos Aires Atelier en Palermo. “Es un nuevo espacio donde voy a poder pintar y mostrar mis obras -cuenta, entusiasmada-. Si bien no será abierto al público, vamos a hacer muestras. Voy a comunicar la apertura, prevista para marzo, en mi página web”. También es coach ontológica y bailarina.
“Me volqué de lleno a la pintura hace unos cuantos años, durante la pandemia, cuando pintaba nueve horas por día -recuerda-. Tuve buenos maestros en la Argentina y en el exterior de realismo contemporáneo y dibujo académico. Todo el estudio y la investigación lo hago sola”.
Para la artista, el presidente Milei representa la esperanza. “Lo siento un tipo intelectual, con claridad”, afirma. “Me gusta escuchar ese tipo de contenidos que comparte, como cuando escucho a otros intelectuales como Mario Sabán y Marcelo Vinzón, vinculados con la carrera de coaching. El Presidente es una persona súper intelectual y me da una esperanza para toda la Argentina, tiene una visión que viene desde otro lugar, no de la política. Apoyo esos ideales”.
Personificar el poder
Para la investigadora y ensayista Laura Malosetti Costa, la galería personal de retratos que el Presidente tiene en Olivos no es sorprendente, “en virtud de los usos que hace de su imagen desde su campaña hasta el día de hoy”, observa la autora de Retratos públicos. Pintura y fotografía en la construcción de imágenes heroicas en América Latina desde el siglo XIX.
“Su cara transfigurada por accesos de furia, la manera de mirar de abajo hacia arriba, todo eso resulta muy estudiado para producir una imagen impactante de sí mismo, por lo violenta y lo novedosa -considera-. En general, los presidentes alrededor del mundo muestran una imagen serena, que busca generar en la población una idea de solvencia y de seguridad. Parecería que este Presidente estaría buscando lo inverso: falta de control, furia, peligrosidad y cierto rasgos infantiles”.
“No hago este planteo en tono de asombro, sino en términos de reflexión -dice-. He trabajado mucho sobre la postura heroica en los retratos, el uso de las tradiciones y la manera en la que el poder se personifica a lo largo del tiempo. Se puede hacer una trayectoria de los personajes que saben que las multitudes están pendientes de sus gestos, como el ‘saludo nazi’ de Elon Musk, que tiene un referente en El juramento de los Horacios, de Jacques-Louis David. Entonces, es trascendente que esos gestos sean la peligrosidad de un león o un personaje de historieta o el loco de la motosierra o la guillotina. La guillotina fue un instrumento utilizado para hacer caer en antiguo régimen. No es una metáfora inocente”.
Para Malosetti Costa, el uso de este arsenal iconográfico explica, en parte, la popularidad que Milei tiene entre los jóvenes. “Esta idea de un presidente descontracturado, cruel, chistoso, que se parece a un personaje de cómic, estos usos que él y los que manejan sus redes hacen no tienen nada de espontáneo. Es un uso premeditado y novedoso que tenemos que tener presente y analizar en su dimensión política. Esas imágenes están teniendo su influencia”, concluye.
El óleo del león que pintó la artista para Javier Milei está colgado en la galería de la Quinta de Olivos desde que el lunes lo entregó en mano el diseñador Roberto Piazza LA NACION