Tragedia en un festejo estudiantil: un adolescente encendió una bomba de estruendo, explotó antes de tiempo y perdió una mano

Lo que debía ser una madrugada de festejos por el Último Primer Día de Colegio (UPD) terminó en una tragedia en la ciudad entrerriana de Victoria donde un adolescente de 16 años sufrió la amputación completa de su mano izquierda luego de que una bomba de estruendo le explotara antes de tiempo. El estremecedor momento quedó registrado en un video que rápidamente se viralizó en las redes.
El incidente ocurrió el lunes en plena vía pública, durante la celebración del último primer día de colegio de los alumnos del último año de la Escuela Normal Superior Osvaldo Magnasco.
Entre el ruido de la pirotecnia y la euforia del momento, el joven, acompañado de un compañero, subió al techo de la entrada de la Escuela con el artefacto en la mano. Pero en cuestión de segundos, la fiesta se convirtió en pesadilla: tras encender la bomba de estruendo, esta explotó de manera inesperada, causándole heridas irreversibles en la mano izquierda.
Horas antes del trágico desenlace, efectivos policiales habían retenido varias botellas de alcohol que los estudiantes llevaban consigo.
En las imágenes captadas por otros estudiantes, se observa al adolescente en pleno festejo cuando, de repente, el mortero falla en su mano y la explosión desata el horror. Gritos, desesperación y el caos se apoderaron del lugar.
Los testigos dieron aviso de inmediato a emergencias, y el menor fue trasladado de urgencia al Hospital Salaberry. A pesar de los esfuerzos del equipo médico por preservar la extremidad, la gravedad de las heridas hizo inevitable la amputación de su mano izquierda. Actualmente, continúa internado y recibe asistencia psicológica.
El jefe departamental de la Policía de Victoria, Martín Tello, advirtió en diálogo con Cadena 3 que este tipo de artefactos debe encenderse en el suelo y a una distancia prudente, debido a su alto poder de detonación.
Además, precisó que en miras de la ordenanza municipal que prohíbe la venta de pirotecnia a menores, se están llevando a cabo las investigaciones correspondientes para determinar quién vendió el mortero en pos de esclarecer cómo y donde los jóvenes adquirieron el explosivo. En este contexto, en las últimas 48 horas procedieron a allanar dos comercios en el barrio, en los cuales confiscaron “elementos de pirotecnia que se vendían de manera ilegal”.
“Estaba previsto que el UPD se desarrollara en la zona de la costanera baja de la localidad, donde se habilitó un lugar para todos los estudiantes de las escuelas secundarias, pero todos organizaron previas en clubes y casas particulares. Previamente, hicieron paso por la Escuela Normal donde este adolescente sube a una de las rejas de la institución educativa y, se desconoce si alguien le da el mortero ya encendido o lo enciende él, pero la pirotecnia le explota en la mano”, relató Tello en diálogo con El Once.
Lo que debía ser una madrugada de festejos por el Último Primer Día de Colegio (UPD) terminó en una tragedia en la ciudad entrerriana de Victoria donde un adolescente de 16 años sufrió la amputación completa de su mano izquierda luego de que una bomba de estruendo le explotara antes de tiempo. El estremecedor momento quedó registrado en un video que rápidamente se viralizó en las redes.
El incidente ocurrió el lunes en plena vía pública, durante la celebración del último primer día de colegio de los alumnos del último año de la Escuela Normal Superior Osvaldo Magnasco.
Entre el ruido de la pirotecnia y la euforia del momento, el joven, acompañado de un compañero, subió al techo de la entrada de la Escuela con el artefacto en la mano. Pero en cuestión de segundos, la fiesta se convirtió en pesadilla: tras encender la bomba de estruendo, esta explotó de manera inesperada, causándole heridas irreversibles en la mano izquierda.
Horas antes del trágico desenlace, efectivos policiales habían retenido varias botellas de alcohol que los estudiantes llevaban consigo.
En las imágenes captadas por otros estudiantes, se observa al adolescente en pleno festejo cuando, de repente, el mortero falla en su mano y la explosión desata el horror. Gritos, desesperación y el caos se apoderaron del lugar.
Los testigos dieron aviso de inmediato a emergencias, y el menor fue trasladado de urgencia al Hospital Salaberry. A pesar de los esfuerzos del equipo médico por preservar la extremidad, la gravedad de las heridas hizo inevitable la amputación de su mano izquierda. Actualmente, continúa internado y recibe asistencia psicológica.
El jefe departamental de la Policía de Victoria, Martín Tello, advirtió en diálogo con Cadena 3 que este tipo de artefactos debe encenderse en el suelo y a una distancia prudente, debido a su alto poder de detonación.
Además, precisó que en miras de la ordenanza municipal que prohíbe la venta de pirotecnia a menores, se están llevando a cabo las investigaciones correspondientes para determinar quién vendió el mortero en pos de esclarecer cómo y donde los jóvenes adquirieron el explosivo. En este contexto, en las últimas 48 horas procedieron a allanar dos comercios en el barrio, en los cuales confiscaron “elementos de pirotecnia que se vendían de manera ilegal”.
“Estaba previsto que el UPD se desarrollara en la zona de la costanera baja de la localidad, donde se habilitó un lugar para todos los estudiantes de las escuelas secundarias, pero todos organizaron previas en clubes y casas particulares. Previamente, hicieron paso por la Escuela Normal donde este adolescente sube a una de las rejas de la institución educativa y, se desconoce si alguien le da el mortero ya encendido o lo enciende él, pero la pirotecnia le explota en la mano”, relató Tello en diálogo con El Once.
El adolescente de 16 años se encuentra internado en el hospital Salaberry, en el cual decidieron amputarle su mano izquierda LA NACION