Claudio Zuchovicki explicó el derrumbe de los mercados y habló del impacto que puede tener en la Argentina

Claudio Zuchovicki, analista económico, afirmó que la ofensiva comercial de Donald Trump tiene como objetivo bajar la tasa de interés, en un contexto en el que EE.UU. enfrenta “el mayor déficit fiscal de su historia”. “Estados Unidos necesita que la tasa de interés baje, sí o sí”, aseguró en diálogo con José Del Rio en el LN+.
Según Zuchovicki, tanto el estado norteamericano como sus ciudadanos atraviesan un nivel de endeudamiento extremo, lo que convierte a las tasas altas en un riesgo estructural. Explicó, en ese marco, si sube la tasa de interés, eso impacta fuertemente en el poder de compra de los norteamericanos. Es por eso que, sostiene, la presión para reducir las tasas se convirtió en una prioridad. Según indica, ese es el contexto que determina la decisión de Trump de escalar en la guerra comercial con China y de aumentar aranceles a numerosos países del mundo.
La lectura del economista plantea que Trump actúa dentro de una lógica coherente con lo que prometió en campaña. “No pensé que iba a pasar tanto, pensé que iba a negociar como hizo con México o Canadá. Sin embargo, lo dijo en campaña y ganó las elecciones diciendo que quería hacer eso”, indicó.
“La confianza te lleva 20 años construirla y derribarla es un segundo”, advirtió, al analizar la magnitud de la caída bursátil. Según explicó, el retroceso de hasta un tercio en los mercados durante la última semana refleja que los actores financieros no están reaccionando ante un evento puntual, sino incorporando la expectativa de un conflicto prolongado.
En relación con el impacto en la economía argentina, Zuchovicki aseguró que no será uniforme. Algunas industrias, como la textil o la de alimentos, podrían verse perjudicadas si China reorienta exportaciones hacia el país en lugar de venderle a Estados Unidos. “Para algunas industrias va a ser un problema, porque China quizás te va a querer meter más productos acá porque no va a querer vender a Estados Unidos”, explicó. Sin embargo, también mencionó que podrían surgir oportunidades en sectores con capacidad de insertarse en nuevos mercados.
El economista sostuvo que la Argentina, a diferencia de otros momentos, está mejor posicionada para enfrentar un escenario global inestable. Destacó especialmente el superávit fiscal, que permite no depender del endeudamiento externo, indicó.
También se refirió al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. A su juicio, representa una señal positiva aunque su efecto directo no se traduzca en un freno inmediato a la volatilidad cambiaria. “El acuerdo con el FMI es una buena noticia, no para controlar el tipo de cambio, sino para que tenga más respaldo el peso”, explicó.
Zuchovicki insistió en que las decisiones políticas que marcan el escenario mundial y, en particular las de Estados Unidos, deben ser comprendidas desde su lógica interna y no a partir de expectativas externas. Remarcó que la estrategia de Trump podría tener un alto costo en términos de credibilidad, pero que sigue un objetivo claro de política económica doméstica: aliviar la carga de la deuda a través de tasas más bajas, incluso si para ello debe generar una turbulencia a nivel global.
Claudio Zuchovicki, analista económico, afirmó que la ofensiva comercial de Donald Trump tiene como objetivo bajar la tasa de interés, en un contexto en el que EE.UU. enfrenta “el mayor déficit fiscal de su historia”. “Estados Unidos necesita que la tasa de interés baje, sí o sí”, aseguró en diálogo con José Del Rio en el LN+.
Según Zuchovicki, tanto el estado norteamericano como sus ciudadanos atraviesan un nivel de endeudamiento extremo, lo que convierte a las tasas altas en un riesgo estructural. Explicó, en ese marco, si sube la tasa de interés, eso impacta fuertemente en el poder de compra de los norteamericanos. Es por eso que, sostiene, la presión para reducir las tasas se convirtió en una prioridad. Según indica, ese es el contexto que determina la decisión de Trump de escalar en la guerra comercial con China y de aumentar aranceles a numerosos países del mundo.
La lectura del economista plantea que Trump actúa dentro de una lógica coherente con lo que prometió en campaña. “No pensé que iba a pasar tanto, pensé que iba a negociar como hizo con México o Canadá. Sin embargo, lo dijo en campaña y ganó las elecciones diciendo que quería hacer eso”, indicó.
“La confianza te lleva 20 años construirla y derribarla es un segundo”, advirtió, al analizar la magnitud de la caída bursátil. Según explicó, el retroceso de hasta un tercio en los mercados durante la última semana refleja que los actores financieros no están reaccionando ante un evento puntual, sino incorporando la expectativa de un conflicto prolongado.
En relación con el impacto en la economía argentina, Zuchovicki aseguró que no será uniforme. Algunas industrias, como la textil o la de alimentos, podrían verse perjudicadas si China reorienta exportaciones hacia el país en lugar de venderle a Estados Unidos. “Para algunas industrias va a ser un problema, porque China quizás te va a querer meter más productos acá porque no va a querer vender a Estados Unidos”, explicó. Sin embargo, también mencionó que podrían surgir oportunidades en sectores con capacidad de insertarse en nuevos mercados.
El economista sostuvo que la Argentina, a diferencia de otros momentos, está mejor posicionada para enfrentar un escenario global inestable. Destacó especialmente el superávit fiscal, que permite no depender del endeudamiento externo, indicó.
También se refirió al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. A su juicio, representa una señal positiva aunque su efecto directo no se traduzca en un freno inmediato a la volatilidad cambiaria. “El acuerdo con el FMI es una buena noticia, no para controlar el tipo de cambio, sino para que tenga más respaldo el peso”, explicó.
Zuchovicki insistió en que las decisiones políticas que marcan el escenario mundial y, en particular las de Estados Unidos, deben ser comprendidas desde su lógica interna y no a partir de expectativas externas. Remarcó que la estrategia de Trump podría tener un alto costo en términos de credibilidad, pero que sigue un objetivo claro de política económica doméstica: aliviar la carga de la deuda a través de tasas más bajas, incluso si para ello debe generar una turbulencia a nivel global.
El economista sostuvo que detrás de las medidas de Trump hay una búsqueda de bajar la tasa de interés LA NACION