Sobreseyeron al camionero que había sido acusado del asesinato de María Cash

La sorpresiva detención, a fines de noviembre pasado, del chofer de camiones Héctor Romero, acusado de haber asesinado a María Cash, la diseñadora de indumentaria que fue vista por última vez el 8 de julio de 2011 en Salta, había generado la expectativa de terminar con más de 13 años de misterio. Pero todo se diluyó en las últimas horas.
El sospechoso fue sobreseído. “No existen pruebas suficientes, elementos objetivos, ni evidencias, que permitan vincular de manera fehaciente al señor Romero con los hechos imputados. La investigación fue rigurosa, imparcial y respetuosa del debido proceso, priorizando en todo momento la búsqueda de la verdad y la preservación de los derechos constitucionales de las partes involucradas”, se explicó en un comunicado de prensa difundido por la Oficina de Prensa del Poder Judicial de Salta.
El sobreseimiento fue dictado por la jueza Mariela Giménez, a cargo del Juzgado Federal de Garantías N°2 de Salta. La magistrada ordenó la inmediata libertad del camionero, quien gozaba del beneficio del arresto domiciliario.
“La investigación fue rigurosa, imparcial y respetuosa del debido proceso, priorizando en todo momento la búsqueda de la verdad y la preservación de los derechos constitucionales de las partes involucradas”, se afirmó en el citado comunicado de prensa.
Si bien se conoció hoy, el fallo fue dictado anteayer. La jueza Giménez también sobreseyó por prescripción de la acción penal al abogado Carlos Enzo Cuellar y al médico neumonólogo Jesús Virgilio Chuquisaca, quienes habían sido indagados por los delitos de falso testimonio en concurso ideal con el delito de entorpecimiento a un funcionario público en el normal desarrollo de una investigación.
En su resolución, a la que tuvo acceso LA NACION, la magistrada sostuvo que “el proceso no afecta el buen nombre y honor del que hubieren gozado” los ahora sobreseídos.
El 27 de noviembre pasado, cuando fue indagado Romero, de 71 años, el fiscal general Eduardo Villalba, a cargo de la investigación, había dicho: “Todo indica que Romero le quito la vida a María Cash e hizo desaparecer el cuerpo. No es que la causa se reactivó, nunca dejó de investigarse. La persona [Romero] va a quedar detenida. El Ministerio Público Fiscal va a solicitar rastrillaje sobre zonas particulares. En una hipótesis inicial se podría decir que actuó solo, pero llama la atención el silencio de su entorno”.
Según surge del expediente judicial, el 19 de noviembre pasado, el fiscal Villalba pidió que Romero sea indagado por el delito de homicidio agravado por alevosía.
“Como fundamento de dicho pedido dijo que ‘del análisis de la totalidad de las actuaciones surgía que Romero habría dado muerte a Cash, aprovechándose de la situación de indefensión en la que se encontraba, sin que se hayan encontrado hasta la fecha el cuerpo de la víctima, en razón de lo cual se desconocía la mecánica empleada por Romero que habría provocado el desenlace fatal”, recordó la jueza en su resolución de 421 páginas.
En su dictamen, el representante del Ministerio Público afirmó que “la causa estuvo signada por pistas o datos falsos que de buena o mala fe se fueron dando y que pusieron en resguardo la responsabilidad de quienes cometieron el ilícito” y explicó que “del nuevo análisis se advierte claramente que estos datos condujeron a que no se ponga foco en Romero, porque nunca se lo considero como la última persona que vio con vida a Cash”.
Cuando desapareció, Cash tenía 29 años. Había decidido viajar a Jujuy para vender la ropa que ella misma diseñaba. Su último contacto con su familia fue el 8 de julio de 2011. La joven se había subido a un ómnibus en la terminal de Retiro, con destino a San Salvador de Jujuy, y fue vista por última vez en Salta. Fue captada por las cámaras de seguridad de la entonces empresa concesionaria de la autopista, en la zona conocida como rotonda de Güemes.
Noticia en desarrollo
La sorpresiva detención, a fines de noviembre pasado, del chofer de camiones Héctor Romero, acusado de haber asesinado a María Cash, la diseñadora de indumentaria que fue vista por última vez el 8 de julio de 2011 en Salta, había generado la expectativa de terminar con más de 13 años de misterio. Pero todo se diluyó en las últimas horas.
El sospechoso fue sobreseído. “No existen pruebas suficientes, elementos objetivos, ni evidencias, que permitan vincular de manera fehaciente al señor Romero con los hechos imputados. La investigación fue rigurosa, imparcial y respetuosa del debido proceso, priorizando en todo momento la búsqueda de la verdad y la preservación de los derechos constitucionales de las partes involucradas”, se explicó en un comunicado de prensa difundido por la Oficina de Prensa del Poder Judicial de Salta.
El sobreseimiento fue dictado por la jueza Mariela Giménez, a cargo del Juzgado Federal de Garantías N°2 de Salta. La magistrada ordenó la inmediata libertad del camionero, quien gozaba del beneficio del arresto domiciliario.
“La investigación fue rigurosa, imparcial y respetuosa del debido proceso, priorizando en todo momento la búsqueda de la verdad y la preservación de los derechos constitucionales de las partes involucradas”, se afirmó en el citado comunicado de prensa.
Si bien se conoció hoy, el fallo fue dictado anteayer. La jueza Giménez también sobreseyó por prescripción de la acción penal al abogado Carlos Enzo Cuellar y al médico neumonólogo Jesús Virgilio Chuquisaca, quienes habían sido indagados por los delitos de falso testimonio en concurso ideal con el delito de entorpecimiento a un funcionario público en el normal desarrollo de una investigación.
En su resolución, a la que tuvo acceso LA NACION, la magistrada sostuvo que “el proceso no afecta el buen nombre y honor del que hubieren gozado” los ahora sobreseídos.
El 27 de noviembre pasado, cuando fue indagado Romero, de 71 años, el fiscal general Eduardo Villalba, a cargo de la investigación, había dicho: “Todo indica que Romero le quito la vida a María Cash e hizo desaparecer el cuerpo. No es que la causa se reactivó, nunca dejó de investigarse. La persona [Romero] va a quedar detenida. El Ministerio Público Fiscal va a solicitar rastrillaje sobre zonas particulares. En una hipótesis inicial se podría decir que actuó solo, pero llama la atención el silencio de su entorno”.
Según surge del expediente judicial, el 19 de noviembre pasado, el fiscal Villalba pidió que Romero sea indagado por el delito de homicidio agravado por alevosía.
“Como fundamento de dicho pedido dijo que ‘del análisis de la totalidad de las actuaciones surgía que Romero habría dado muerte a Cash, aprovechándose de la situación de indefensión en la que se encontraba, sin que se hayan encontrado hasta la fecha el cuerpo de la víctima, en razón de lo cual se desconocía la mecánica empleada por Romero que habría provocado el desenlace fatal”, recordó la jueza en su resolución de 421 páginas.
En su dictamen, el representante del Ministerio Público afirmó que “la causa estuvo signada por pistas o datos falsos que de buena o mala fe se fueron dando y que pusieron en resguardo la responsabilidad de quienes cometieron el ilícito” y explicó que “del nuevo análisis se advierte claramente que estos datos condujeron a que no se ponga foco en Romero, porque nunca se lo considero como la última persona que vio con vida a Cash”.
Cuando desapareció, Cash tenía 29 años. Había decidido viajar a Jujuy para vender la ropa que ella misma diseñaba. Su último contacto con su familia fue el 8 de julio de 2011. La joven se había subido a un ómnibus en la terminal de Retiro, con destino a San Salvador de Jujuy, y fue vista por última vez en Salta. Fue captada por las cámaras de seguridad de la entonces empresa concesionaria de la autopista, en la zona conocida como rotonda de Güemes.
Noticia en desarrollo
Se trata de Héctor Romero, quien había sido imputado de “homicidio calificado” LA NACION