Mundial U20: Sudáfrica terminó a pura potencia con el sueño de los Pumitas

Fue una derrota digna por la entrega, por haberlo dejado todo ante un rival superior, física y técnicamente. Por haber dominado en pasajes del segundo tiempo a quienes llegaban a la semifinal con récords impactantes: el equipo más goleador, con 178 puntos anotados; la segunda mejor defensa del torneo, con 53 puntos recibidos (apenas siete más que Nueva Zelanda), el que más veces apoyó la pelota en el ingoal contrario (26 veces en tres partidos); el que con sus delanteros caminó por encima de Australia, Inglaterra y Escocia, pero que le costó hacerlo sobre los chicos vestidos de celeste y blanco. A quienes, por otra parte, la fortuna nunca les sonrío en los momentos decisivos: ni un pique a favor, siempre un resbalón, una pelota arisca, un pase demasiado fuerte…
Y una derrota digna por el decoro en el comportamiento de los jugadores. Intentaron todo. Jamás se rindieron. Pero Sudáfrica se impuso por 48-24 y se clasificó para la final del Mundial U20 que se disputa en Italia.
Un comienzo errático de los dirigidos por Nicolás Fernández Miranda, sin la concentración necesaria para mantener a raya a un adversario de alto riesgo, volvió a pasarle una factura imposible de pagar, por lo abultada. Le sucedió con Gales y lo revirtió, le pasó ante Francia y lo padeció. Ayer, el primer ataque a fondo de los Baby Boks, a los 8 minutos, rompió la frágil defensa y sentenció a los Pumitas. Les rompió en mil pedazos el sueño de llegar por primera vez a la final de este certamen juvenil, organizado por World Rugby y reestructurado, del modo actual, en 2008.
En menos de un cuarto de hora, varios sudafricanos desfilaron por el ingoal: el genial centro Albertus Bester, el escurridizo medio-scrum Hassiem Read, el veloz wing Jaco Williams y el fuerte segunda línea J..J. Theron. Encima, su pateador, el apertura Vusi Moyo, rubricó con su infalible puntería cada una de las estocadas. Entonces, el andar, se por sí sinuoso, por el campo de Viadana se convirtió en una cuesta demasiado empinada como para recorrer con éxito. Sólo un disparo certero del apertura Rafael Benedit, le permitió a los argentinos mechar tres puntos entre los festejos de los chicos de camiseta verde.
La fragilidad defensiva, puesta de manifiesto desde el día del debut con los galeses, le costó muy caro en este mundial: el primer puesto de la zona a manos de Francia, el viernes anterior, y la eliminación definitiva, ahora. Por lo tanto, jugar una final seguirá siendo una quimera para esta categoría 20. El próximo sábado 19, a las 13, los argentinos disputarán el tercer puesto en la ciudad de Calvisano, también en la región de Lombardía. Allí los esperan los franceses, derrotados en la otra llave, 34-26 por Nueva Zelanda.
De ganarle los Pumitas a los galos, nuestro equipo igualará su mejor ubicación en la historia de la competencia, el tercer sitio alcanzado en Inglaterra 2016. En cambio, si llegaran a perder, quedarían cuartos, como en Sudáfrica 2012 y Argentina 2019, cuando el certamen se realizó en las sedes de Santa Fe y Rosario. Mientras tanto, Sudáfrica buscará, el mismo día, a continuación de Argentina-Francia, pero en Rovigo, su segunda estrella mundialista de la categoría, la primera la obtuvo en su propia tierra, allá por 2012.
Los Pumitas reaccionaron en el segundo tiempo. A fuerza de coraje, el aguerrido pack, renovado con piernas frescas desde el banco, arrinconó a Sudáfrica cerca de sus 25 yardas. Lo complicó con el scrum, lo arreó con el maul, pero le faltó un poco de lucidez, precisión y algo de suerte, también, para regresar a su campo con cinco o siete puntos tras esos momentos de dominio. Y los Baby Boks, agazapados, esperaban la oportunidad indicada para lanzar sus letales contraataques.
El ganador no replicó con frecuencia, pero cuando lo hizo, marcó tantos: sacando provecho de las infracciones (jugadas de tres unidades) o invadiendo la zona del arco (acciones de siete). Esa efectividad cortó de cuajo el incipiente entusiasmo de los chicos argentinos que ya veían, promediando la etapa, que la suerte estaba echada y no tenía pensado levantarse.
No bajaron los brazos. Siguieron machacando. Los cambios trajeron aire fresco y la voluntad por llegar al try no se quebró a pesar de los mil infructuosos intentos. Y al final llegó el premio. Ramón Fernández Miranda concluyó felizmente una buena acción de Valentino Reggiardo… Pero. Sudáfrica se llevó, en la última corrida, el último festejo: el wing Cheswill Jooste se cortó tras la salida y no paró hasta la hache.
Terminó el sueño de campeón de los Pumitas. Pero la aventura sigue en el verano italiano. Los chicos quieren ser terceros y subir al podio. Para saber cuánto pesa la copa, habrá que esperar hasta el año próximo.
Lo más destacado del encuentro
La síntesis
Sudáfrica: Gilermo Mentoe; Cheswill Jooste, Demitre Erasmus, Albertus Bester y Jaco Williams; Vusi Moyo y Hassiem Pead; Bathobele Hlekani, Wandile Mlaba y Xola Nyali; J.J. Theron y Riley Norton (capitán); Simphiwe Ngobese, Siphosethu Mnebelele y Hendrik Lubbe.
Cambios: ST: 10 minutos, Oliver Reid por Ngobese, J.D. Erasmus por Lubbe; Jaco Grobbelaar por J.J. Theron, Matt Romao por Hlekani y Ceano Everson por Mlaba, y 28, Fano Linde por Moyo, Juandre Schoeman por Mnebelele, y Dominic Malgas por Bester.
Entrenador: Kevin Foote.
Argentina: Pascal Senillosa; Timoteo Silva, Pedro Coll, Felipe Ledesma (capitán) y Bautista Lescano; Rafael Benedit y Félix Corleto; Santiago Neyra, Agustín García Campos y Tomás Dande; Alvaro García Iandolino y Tomás Duclos; Tomás Rapetti, Tadeo Ledesma Arocena y Diego Correa.
Cambios: ET: Pampa Storey por García Campos. ST: 3 minutos, Gael Galván por Rapetti; 5, Valentino Reggiardo por Corleto; 14, Juan Ignacio Rodríguez por Correa; 17, Jerónimo Otaño por Ledesma Arocena; 20, Ramón Fernández Miranda por Benedit, y 22, Valentino Freiria por García Iandolino y Aquiles Vieyra por Silva.
Entrenador: Nicolás Fernández Miranda.
- Primer tiempo: 8 minutos, gol de Moyo por try de Bester (SA); 10, gol de Moyo por try de Pead (SA); 13, penal de Benedit (A); 16, gol de Moyo por try de Williams (SA); 22, gol de Moyo por try de Theron (SA), y 38, gol de Benedit por try de García Campos (A).
- Amonestado: 38 minutos, Ngobese (SA).
- Resultado parcial: Sudáfrica 28, Argentina 10.
- Segundo tiempo: 11 minutos, gol de Benedit por try de Silva (A); 14, penal de Moyo (SA); 17, penal de Moyo (SA); 19, gol de Moyo por try de Bester (SA); 32, gol de Senillosa por try de Fernández Miranda (A), y 40, gol de Malgas por try de Jooste (SA).
- Amonestado: 26 minutos, Reid (SA).
- Resultado parcial: Sudáfrica 20, Argentina 14.
- Arbitro: Jeremy Rozier (Francia)
- Cancha: Luigi Zaffanella (Viadana)
Fue una derrota digna por la entrega, por haberlo dejado todo ante un rival superior, física y técnicamente. Por haber dominado en pasajes del segundo tiempo a quienes llegaban a la semifinal con récords impactantes: el equipo más goleador, con 178 puntos anotados; la segunda mejor defensa del torneo, con 53 puntos recibidos (apenas siete más que Nueva Zelanda), el que más veces apoyó la pelota en el ingoal contrario (26 veces en tres partidos); el que con sus delanteros caminó por encima de Australia, Inglaterra y Escocia, pero que le costó hacerlo sobre los chicos vestidos de celeste y blanco. A quienes, por otra parte, la fortuna nunca les sonrío en los momentos decisivos: ni un pique a favor, siempre un resbalón, una pelota arisca, un pase demasiado fuerte…
Y una derrota digna por el decoro en el comportamiento de los jugadores. Intentaron todo. Jamás se rindieron. Pero Sudáfrica se impuso por 48-24 y se clasificó para la final del Mundial U20 que se disputa en Italia.
Un comienzo errático de los dirigidos por Nicolás Fernández Miranda, sin la concentración necesaria para mantener a raya a un adversario de alto riesgo, volvió a pasarle una factura imposible de pagar, por lo abultada. Le sucedió con Gales y lo revirtió, le pasó ante Francia y lo padeció. Ayer, el primer ataque a fondo de los Baby Boks, a los 8 minutos, rompió la frágil defensa y sentenció a los Pumitas. Les rompió en mil pedazos el sueño de llegar por primera vez a la final de este certamen juvenil, organizado por World Rugby y reestructurado, del modo actual, en 2008.
En menos de un cuarto de hora, varios sudafricanos desfilaron por el ingoal: el genial centro Albertus Bester, el escurridizo medio-scrum Hassiem Read, el veloz wing Jaco Williams y el fuerte segunda línea J..J. Theron. Encima, su pateador, el apertura Vusi Moyo, rubricó con su infalible puntería cada una de las estocadas. Entonces, el andar, se por sí sinuoso, por el campo de Viadana se convirtió en una cuesta demasiado empinada como para recorrer con éxito. Sólo un disparo certero del apertura Rafael Benedit, le permitió a los argentinos mechar tres puntos entre los festejos de los chicos de camiseta verde.
La fragilidad defensiva, puesta de manifiesto desde el día del debut con los galeses, le costó muy caro en este mundial: el primer puesto de la zona a manos de Francia, el viernes anterior, y la eliminación definitiva, ahora. Por lo tanto, jugar una final seguirá siendo una quimera para esta categoría 20. El próximo sábado 19, a las 13, los argentinos disputarán el tercer puesto en la ciudad de Calvisano, también en la región de Lombardía. Allí los esperan los franceses, derrotados en la otra llave, 34-26 por Nueva Zelanda.
De ganarle los Pumitas a los galos, nuestro equipo igualará su mejor ubicación en la historia de la competencia, el tercer sitio alcanzado en Inglaterra 2016. En cambio, si llegaran a perder, quedarían cuartos, como en Sudáfrica 2012 y Argentina 2019, cuando el certamen se realizó en las sedes de Santa Fe y Rosario. Mientras tanto, Sudáfrica buscará, el mismo día, a continuación de Argentina-Francia, pero en Rovigo, su segunda estrella mundialista de la categoría, la primera la obtuvo en su propia tierra, allá por 2012.
Los Pumitas reaccionaron en el segundo tiempo. A fuerza de coraje, el aguerrido pack, renovado con piernas frescas desde el banco, arrinconó a Sudáfrica cerca de sus 25 yardas. Lo complicó con el scrum, lo arreó con el maul, pero le faltó un poco de lucidez, precisión y algo de suerte, también, para regresar a su campo con cinco o siete puntos tras esos momentos de dominio. Y los Baby Boks, agazapados, esperaban la oportunidad indicada para lanzar sus letales contraataques.
El ganador no replicó con frecuencia, pero cuando lo hizo, marcó tantos: sacando provecho de las infracciones (jugadas de tres unidades) o invadiendo la zona del arco (acciones de siete). Esa efectividad cortó de cuajo el incipiente entusiasmo de los chicos argentinos que ya veían, promediando la etapa, que la suerte estaba echada y no tenía pensado levantarse.
No bajaron los brazos. Siguieron machacando. Los cambios trajeron aire fresco y la voluntad por llegar al try no se quebró a pesar de los mil infructuosos intentos. Y al final llegó el premio. Ramón Fernández Miranda concluyó felizmente una buena acción de Valentino Reggiardo… Pero. Sudáfrica se llevó, en la última corrida, el último festejo: el wing Cheswill Jooste se cortó tras la salida y no paró hasta la hache.
Terminó el sueño de campeón de los Pumitas. Pero la aventura sigue en el verano italiano. Los chicos quieren ser terceros y subir al podio. Para saber cuánto pesa la copa, habrá que esperar hasta el año próximo.
Lo más destacado del encuentro
La síntesis
Sudáfrica: Gilermo Mentoe; Cheswill Jooste, Demitre Erasmus, Albertus Bester y Jaco Williams; Vusi Moyo y Hassiem Pead; Bathobele Hlekani, Wandile Mlaba y Xola Nyali; J.J. Theron y Riley Norton (capitán); Simphiwe Ngobese, Siphosethu Mnebelele y Hendrik Lubbe.
Cambios: ST: 10 minutos, Oliver Reid por Ngobese, J.D. Erasmus por Lubbe; Jaco Grobbelaar por J.J. Theron, Matt Romao por Hlekani y Ceano Everson por Mlaba, y 28, Fano Linde por Moyo, Juandre Schoeman por Mnebelele, y Dominic Malgas por Bester.
Entrenador: Kevin Foote.
Argentina: Pascal Senillosa; Timoteo Silva, Pedro Coll, Felipe Ledesma (capitán) y Bautista Lescano; Rafael Benedit y Félix Corleto; Santiago Neyra, Agustín García Campos y Tomás Dande; Alvaro García Iandolino y Tomás Duclos; Tomás Rapetti, Tadeo Ledesma Arocena y Diego Correa.
Cambios: ET: Pampa Storey por García Campos. ST: 3 minutos, Gael Galván por Rapetti; 5, Valentino Reggiardo por Corleto; 14, Juan Ignacio Rodríguez por Correa; 17, Jerónimo Otaño por Ledesma Arocena; 20, Ramón Fernández Miranda por Benedit, y 22, Valentino Freiria por García Iandolino y Aquiles Vieyra por Silva.
Entrenador: Nicolás Fernández Miranda.
- Primer tiempo: 8 minutos, gol de Moyo por try de Bester (SA); 10, gol de Moyo por try de Pead (SA); 13, penal de Benedit (A); 16, gol de Moyo por try de Williams (SA); 22, gol de Moyo por try de Theron (SA), y 38, gol de Benedit por try de García Campos (A).
- Amonestado: 38 minutos, Ngobese (SA).
- Resultado parcial: Sudáfrica 28, Argentina 10.
- Segundo tiempo: 11 minutos, gol de Benedit por try de Silva (A); 14, penal de Moyo (SA); 17, penal de Moyo (SA); 19, gol de Moyo por try de Bester (SA); 32, gol de Senillosa por try de Fernández Miranda (A), y 40, gol de Malgas por try de Jooste (SA).
- Amonestado: 26 minutos, Reid (SA).
- Resultado parcial: Sudáfrica 20, Argentina 14.
- Arbitro: Jeremy Rozier (Francia)
- Cancha: Luigi Zaffanella (Viadana)
Los Baby Boks dominaron por amplio margen al equipo argentino, que buscará el tercer puesto LA NACION