Nacieron dos cachorros de tigre de Amur en un zoológico y las tiernas fotos recorren el mundo
El pasado jueves presentaron en Colonia, Alemania, dos cachorros de tigre de Amur y dieron su primera salida pública en el zoológico local. A pesar de que en la actualidad este tipo de espacio no poseen el visto bueno por parte de la comunidad, su objetivo principal es el de preservar la especie en peligro de extinción y trabajar para que vaya en aumento.
Se trata de una cachorra hembra a quien bautizaron como Tochka y un cachorro macho, al que llamaron Timur. Ambos nacieron en abril de este año y ahora pesan 13 kilos cada uno. Al momento de ingresar en la jaula, recorrieron y exploraron cada rincón junto a su madre de 13 años, Katinka.
Según informó el zoo en una publicación de sus redes sociales, “están bien alimentados, alertas y despiertos”. Además, indicaron que todavía consumen leche, pero que su interés por la carne va en aumento.
Durante las primeras semanas después del nacimiento, el dúo permaneció con la madre en una sección apartada de todos. Así como en la naturaleza, los cachorros de tigre necesitan mucho descanso al principio, ya que no se han desarrollado en su totalidad y, por lo tanto, son vulnerables a diferentes riesgos externos. Gradualmente, los dos ampliaron su radio y exploraron las instalaciones del establo trasero. En el comunicado de prensa señalaron que a principios de esta semana, recibieron la última de dos vacunas. La inmunización básica se completa con esto, otro requisito previo e importante para ir a las instalaciones al aire libre.
Esto alegró a los conservacionistas y autoridades del zoológico, ya que es la primera vez en 11 años que nacen dos ejemplares de tigre de Amur en Colonia. Esto fue resultado del intercambio de dos individuos entre este parque y el de Núremberg, ya que las parejas no se apareaban seguido. Una vez que Katinka llegó a aquí, de inmediato consolidó un buen vínculo con Sergan y recién este 2024 lograron tener dos crías.
Los tigres de Amur, una especie amenazada
La existencia de estos felinos se extendía desde Ucrania hasta Turquía y de allí hasta Siberia, en Rusia. Lamentablemente con el paso del tiempo el número de ejemplares disminuyó hacia el borde de la extinción. Incluso en países del centro de Asia directamente desapareció. Solo en pequeñas porciones de territorio logró sobrevivir y gracias a diferentes programas de conservación, en la actualidad se trabaja para salvar la especie.
Los esfuerzos de preservarlos en la vida silvestre fueron en vano, ya que los cazadores furtivos buscan su piel, al igual que la pérdida de su hábitat, se convirtió en una terrible realidad. Es por ello que zoológicos como el de Colonia, implementó diferentes programas para elevar el número de tigres de Amur.
La población total de tigres en la vida libre en todo el mundo se estima en solo 4500 animales que quedan. Los zoológicos líderes científicamente hacen una importante contribución a la protección de los tigres a través de programas de crianza coordinados. Esto incluye, por ejemplo, el Programa europeo de crianza para la conservación, que se introdujo desde 1985. Por último, el organismo explicó: “En la actualidad, 240 tigres de Amur están coordinados en 100 localizaciones. Incluso se está educando a los 700 millones de visitantes de todos los zoológicos y a la par se han recaudado donaciones de alrededor de 6 millones de dólares anuales, y proporcionando conocimientos especializados y ayuda activa. Los zoológicos están tratando de ayudar al tigre”.
El pasado jueves presentaron en Colonia, Alemania, dos cachorros de tigre de Amur y dieron su primera salida pública en el zoológico local. A pesar de que en la actualidad este tipo de espacio no poseen el visto bueno por parte de la comunidad, su objetivo principal es el de preservar la especie en peligro de extinción y trabajar para que vaya en aumento.
Se trata de una cachorra hembra a quien bautizaron como Tochka y un cachorro macho, al que llamaron Timur. Ambos nacieron en abril de este año y ahora pesan 13 kilos cada uno. Al momento de ingresar en la jaula, recorrieron y exploraron cada rincón junto a su madre de 13 años, Katinka.
Según informó el zoo en una publicación de sus redes sociales, “están bien alimentados, alertas y despiertos”. Además, indicaron que todavía consumen leche, pero que su interés por la carne va en aumento.
Durante las primeras semanas después del nacimiento, el dúo permaneció con la madre en una sección apartada de todos. Así como en la naturaleza, los cachorros de tigre necesitan mucho descanso al principio, ya que no se han desarrollado en su totalidad y, por lo tanto, son vulnerables a diferentes riesgos externos. Gradualmente, los dos ampliaron su radio y exploraron las instalaciones del establo trasero. En el comunicado de prensa señalaron que a principios de esta semana, recibieron la última de dos vacunas. La inmunización básica se completa con esto, otro requisito previo e importante para ir a las instalaciones al aire libre.
Esto alegró a los conservacionistas y autoridades del zoológico, ya que es la primera vez en 11 años que nacen dos ejemplares de tigre de Amur en Colonia. Esto fue resultado del intercambio de dos individuos entre este parque y el de Núremberg, ya que las parejas no se apareaban seguido. Una vez que Katinka llegó a aquí, de inmediato consolidó un buen vínculo con Sergan y recién este 2024 lograron tener dos crías.
Los tigres de Amur, una especie amenazada
La existencia de estos felinos se extendía desde Ucrania hasta Turquía y de allí hasta Siberia, en Rusia. Lamentablemente con el paso del tiempo el número de ejemplares disminuyó hacia el borde de la extinción. Incluso en países del centro de Asia directamente desapareció. Solo en pequeñas porciones de territorio logró sobrevivir y gracias a diferentes programas de conservación, en la actualidad se trabaja para salvar la especie.
Los esfuerzos de preservarlos en la vida silvestre fueron en vano, ya que los cazadores furtivos buscan su piel, al igual que la pérdida de su hábitat, se convirtió en una terrible realidad. Es por ello que zoológicos como el de Colonia, implementó diferentes programas para elevar el número de tigres de Amur.
La población total de tigres en la vida libre en todo el mundo se estima en solo 4500 animales que quedan. Los zoológicos líderes científicamente hacen una importante contribución a la protección de los tigres a través de programas de crianza coordinados. Esto incluye, por ejemplo, el Programa europeo de crianza para la conservación, que se introdujo desde 1985. Por último, el organismo explicó: “En la actualidad, 240 tigres de Amur están coordinados en 100 localizaciones. Incluso se está educando a los 700 millones de visitantes de todos los zoológicos y a la par se han recaudado donaciones de alrededor de 6 millones de dólares anuales, y proporcionando conocimientos especializados y ayuda activa. Los zoológicos están tratando de ayudar al tigre”.
Una grata noticia llegó a los medios internacionales, ya que los dos felinos son de una especie que se encuentran en peligro de extinción; cómo son y qué significa a futuro LA NACION
