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¿Sos de los que espera que tu pareja cambie por vos? Expertos explican por qué eso no va a pasar

En las relaciones de pareja, hay que tener claro que existen algunas situaciones en las que no es posible llegar a acuerdos, a pesar de que uno de los dos diga lo contrario. A todas las personas no les gusta lo mismo o no tienen las mismas actitudes y es por ello que esto puede llegar a desacuerdos con su pareja.

Esto puede llevar a la ruptura de noviazgos y matrimonios porque es posible que alguna de las partes tenga actitudes tan arraigadas a sí mismo que por más que le pidan que cambie no lo haga. Muchas parejas quieren a toda costa que su novio o esposa cambien, pero si no existe voluntad por parte de esta, no habrá ‘poder humano’ que esto suceda y al respecto, expertos en relaciones de pareja resolvieron esa duda de si una persona puede cambiar y qué hacer si es a vos a quien le piden esto.

El rechazo al cambio es una reacción natural, según psicólogos, porque algunas de esas actitudes o comportamientos vienen desde la niñez. “Cuando alguien aparece y hace las cosas de modo diferente al nuestro, lo primero que nos puede provocar es cierto rechazo. Pero, no siempre ese cambio tiene que ser para mal”, asegura la psicóloga y coach especializada en relaciones sentimentales, Helena Calvo.

Es por ello que cuando se quiere que la pareja cambie algún comportamiento, se debe tener coherencia en cuanto al cambio, es decir, que esa actitud sea algo que realmente esté afectando a la persona y a la vez a la relación, como por ejemplo un vicio. “La pareja debe ser esa persona en la que nos apoyamos y que nos ayuda a crecer y a estar mejor y eso nos ayudará a entender que no todo cambio tiene que ser negativo, puede ser que la otra persona sepa hacer las cosas de una manera mejor”, continúa la profesional.

Cuando se trata de alguna actitud, puede ser que exista una mejor manera de hacer las cosas o no mejor, pero si diferente y está se puede poner sobre la mesa para determinar si puede haber un cambio, si es lo que más le conviene. Estas formas de hacer las cosas no tienen por qué generar malestar en ninguna de las partes, y puede haber forma de negociar, pactar y ajustar.

“Hacer pequeños ajustes no significa que perdamos o negociemos nuestros valores, eso sí, siempre respetando la individualidad o la identidad del otro”, puntualiza la experta en relaciones de pareja Gabriela Paoli.

Al pedirle a la pareja que cambie cierto comportamiento, lo primero que se debe tener en cuenta es que este debe ser personal, es decir, tener la voluntad de querer cambiar si se lo propone y tiene la conciencia de que eso está afectando al otro y creando tensión en la pareja. “Aunque si uno sabe que a la pareja le disgusta, (…) y ella o él es la persona más maravillosa y que uno ama, pues se intenta cambiar para que no genere ese malestar”, asegura Paoli.

Sin embargo, “no es recomendable que el otro cambie por nosotros”, aclara Paoli, sino que es necesario llegar a algún pacto con la pareja para ir cambiando poco a poco esos comportamientos como la impuntualidad o el desorden, que son temas que pueden provocar molestias en su novio o esposo y aunque, por ejemplo, en el caso de la impuntualidad si es muy difícil de cambiar, al menos se le puede pedir al otro que le informe que se va a demorar, como por un signo de respeto.

No obstante, cabe resaltar que los cambios deben darse de manera voluntaria, cuando estos son coherentes y fáciles de adaptarse a ellos, pero si la otra persona le está haciendo daño con sus comportamientos, quien tiene el problema es él, pero si vos seguís esperando que cambie, el problema puede estar inmerso en sí mismo y relacionarse con dependencia emocional e inseguridad.

“Si la otra persona lo comprende y lo acepta se da un plazo de cambio, pero si pasado un tiempo no se avanzó, lo mejor es tomar un cierto distanciamiento, buscar ayuda o una separación; es fundamental, para que se produzcan cambios, que exista humildad y un reconocimiento de la parte de responsabilidad de cada uno”, puntualiza Calvo.

*Por Luz Ángela Rodríguez Coral

En las relaciones de pareja, hay que tener claro que existen algunas situaciones en las que no es posible llegar a acuerdos, a pesar de que uno de los dos diga lo contrario. A todas las personas no les gusta lo mismo o no tienen las mismas actitudes y es por ello que esto puede llegar a desacuerdos con su pareja.

Esto puede llevar a la ruptura de noviazgos y matrimonios porque es posible que alguna de las partes tenga actitudes tan arraigadas a sí mismo que por más que le pidan que cambie no lo haga. Muchas parejas quieren a toda costa que su novio o esposa cambien, pero si no existe voluntad por parte de esta, no habrá ‘poder humano’ que esto suceda y al respecto, expertos en relaciones de pareja resolvieron esa duda de si una persona puede cambiar y qué hacer si es a vos a quien le piden esto.

El rechazo al cambio es una reacción natural, según psicólogos, porque algunas de esas actitudes o comportamientos vienen desde la niñez. “Cuando alguien aparece y hace las cosas de modo diferente al nuestro, lo primero que nos puede provocar es cierto rechazo. Pero, no siempre ese cambio tiene que ser para mal”, asegura la psicóloga y coach especializada en relaciones sentimentales, Helena Calvo.

Es por ello que cuando se quiere que la pareja cambie algún comportamiento, se debe tener coherencia en cuanto al cambio, es decir, que esa actitud sea algo que realmente esté afectando a la persona y a la vez a la relación, como por ejemplo un vicio. “La pareja debe ser esa persona en la que nos apoyamos y que nos ayuda a crecer y a estar mejor y eso nos ayudará a entender que no todo cambio tiene que ser negativo, puede ser que la otra persona sepa hacer las cosas de una manera mejor”, continúa la profesional.

Cuando se trata de alguna actitud, puede ser que exista una mejor manera de hacer las cosas o no mejor, pero si diferente y está se puede poner sobre la mesa para determinar si puede haber un cambio, si es lo que más le conviene. Estas formas de hacer las cosas no tienen por qué generar malestar en ninguna de las partes, y puede haber forma de negociar, pactar y ajustar.

“Hacer pequeños ajustes no significa que perdamos o negociemos nuestros valores, eso sí, siempre respetando la individualidad o la identidad del otro”, puntualiza la experta en relaciones de pareja Gabriela Paoli.

Al pedirle a la pareja que cambie cierto comportamiento, lo primero que se debe tener en cuenta es que este debe ser personal, es decir, tener la voluntad de querer cambiar si se lo propone y tiene la conciencia de que eso está afectando al otro y creando tensión en la pareja. “Aunque si uno sabe que a la pareja le disgusta, (…) y ella o él es la persona más maravillosa y que uno ama, pues se intenta cambiar para que no genere ese malestar”, asegura Paoli.

Sin embargo, “no es recomendable que el otro cambie por nosotros”, aclara Paoli, sino que es necesario llegar a algún pacto con la pareja para ir cambiando poco a poco esos comportamientos como la impuntualidad o el desorden, que son temas que pueden provocar molestias en su novio o esposo y aunque, por ejemplo, en el caso de la impuntualidad si es muy difícil de cambiar, al menos se le puede pedir al otro que le informe que se va a demorar, como por un signo de respeto.

No obstante, cabe resaltar que los cambios deben darse de manera voluntaria, cuando estos son coherentes y fáciles de adaptarse a ellos, pero si la otra persona le está haciendo daño con sus comportamientos, quien tiene el problema es él, pero si vos seguís esperando que cambie, el problema puede estar inmerso en sí mismo y relacionarse con dependencia emocional e inseguridad.

“Si la otra persona lo comprende y lo acepta se da un plazo de cambio, pero si pasado un tiempo no se avanzó, lo mejor es tomar un cierto distanciamiento, buscar ayuda o una separación; es fundamental, para que se produzcan cambios, que exista humildad y un reconocimiento de la parte de responsabilidad de cada uno”, puntualiza Calvo.

*Por Luz Ángela Rodríguez Coral

 Los especialistas consideran que si no existe voluntad de parte del individuo, no se podrá hacer nada al respecto; enterate más detalles en esta nota  LA NACION

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