Estudió contabilidad, pero cuando Rusia invadió Ucrania se unió al Ejército y hace un trabajo que jamás imaginó
La ucraniana Yullia Kuzmina, de 32 años de edad, estudió contabilidad y comenzó su carrera profesional en el ámbito de las finanzas en Ucrania. Pero, ante la invasión rusa, cambió drásticamente su vida y se unió al ejército de su país para colaborar con roles administrativos y operativos, con prioridad en el campo de la electricidad.
Un cambio radical
Yullia Kuzmina tenía su vida planificada dentro de su actividad profesional, que es la contabilidad, pero la invasión rusa en febrero de 2022 cambió todos los planes. En ese momento, tomó la decisión colaborar con su país y unirse al ejército, en el que desarrolló tareas tanto administrativas como operativas.
En sus inicios en el ejército, Kuzmina empezó como oficinista antes de convertirse en granadera en el 46º batallón de asalto, conocido como el Batallón Donbas. Su experiencia militar la preparó para enfrentar situaciones extremas y fuertes desafíos. Sin embargo, los ataques rusos llevaron a la disolución de su unidad por la falta de recursos y municiones.
Ante la imposibilidad de continuar en el ejército, y con el agravante de que su padre se enfermó, tomó la difícil decisión de retirarse temporalmente de sus deberes militares para poder centrarse en el cuidado de su familia.
La reorientación en el ejército
En mayo de 2022, con el deseo de seguir contribuyendo al esfuerzo bélico de Ucrania, Kuzmina volvió al ejército y reorientó su carrera hacia el campo de la electricidad. Actualmente, se está formando como electricista en Kamianske, una ciudad en el este de Ucrania.
En su nuevo rol trabaja en una subestación eléctrica, un sector crucial que estuvo constantemente atacado por Rusia. Según Business Insider, la ucraniana comentó que “trabajar en la red eléctrica es importante” porque la infraestructura crítica está bajo constante bombardeo.
La participación femenina en la guerra
La guerra provocó una significativa escasez de mano de obra en Ucrania. Con un número elevado de hombres en el ejército o desplazados del país, el gobierno incentivó la incorporación de mujeres en campos tradicionalmente dominados por los hombres.
Tanto es así que, desde enero hasta mayo de 2024, el número de mujeres contratadas aumentó de aproximadamente 45.000 a 48.000. Además, la formación profesional para mujeres creció un 75%, porcentaje que refleja un esfuerzo importante por parte del gobierno para cubrir vacantes en áreas críticas como conducción y trabajos mecánicos.
El cambio en la participación femenina en estos roles no fue sencillo. Aunque Ucrania derogó una ley soviética que prohibía a las mujeres acceder a ciertos trabajos en 2017, los efectos de esa normativa aún persisten en la sociedad. Aún hay estereotipos de género y resistencia por parte de algunos empleadores y familiares que dificultan la inclusión plena de mujeres en estos campos. A pesar de estos obstáculos, Kuzmina sigue adelante en las tareas del ejército porque tiene un fuerte compromiso con su país.
La ucraniana Yullia Kuzmina, de 32 años de edad, estudió contabilidad y comenzó su carrera profesional en el ámbito de las finanzas en Ucrania. Pero, ante la invasión rusa, cambió drásticamente su vida y se unió al ejército de su país para colaborar con roles administrativos y operativos, con prioridad en el campo de la electricidad.
Un cambio radical
Yullia Kuzmina tenía su vida planificada dentro de su actividad profesional, que es la contabilidad, pero la invasión rusa en febrero de 2022 cambió todos los planes. En ese momento, tomó la decisión colaborar con su país y unirse al ejército, en el que desarrolló tareas tanto administrativas como operativas.
En sus inicios en el ejército, Kuzmina empezó como oficinista antes de convertirse en granadera en el 46º batallón de asalto, conocido como el Batallón Donbas. Su experiencia militar la preparó para enfrentar situaciones extremas y fuertes desafíos. Sin embargo, los ataques rusos llevaron a la disolución de su unidad por la falta de recursos y municiones.
Ante la imposibilidad de continuar en el ejército, y con el agravante de que su padre se enfermó, tomó la difícil decisión de retirarse temporalmente de sus deberes militares para poder centrarse en el cuidado de su familia.
La reorientación en el ejército
En mayo de 2022, con el deseo de seguir contribuyendo al esfuerzo bélico de Ucrania, Kuzmina volvió al ejército y reorientó su carrera hacia el campo de la electricidad. Actualmente, se está formando como electricista en Kamianske, una ciudad en el este de Ucrania.
En su nuevo rol trabaja en una subestación eléctrica, un sector crucial que estuvo constantemente atacado por Rusia. Según Business Insider, la ucraniana comentó que “trabajar en la red eléctrica es importante” porque la infraestructura crítica está bajo constante bombardeo.
La participación femenina en la guerra
La guerra provocó una significativa escasez de mano de obra en Ucrania. Con un número elevado de hombres en el ejército o desplazados del país, el gobierno incentivó la incorporación de mujeres en campos tradicionalmente dominados por los hombres.
Tanto es así que, desde enero hasta mayo de 2024, el número de mujeres contratadas aumentó de aproximadamente 45.000 a 48.000. Además, la formación profesional para mujeres creció un 75%, porcentaje que refleja un esfuerzo importante por parte del gobierno para cubrir vacantes en áreas críticas como conducción y trabajos mecánicos.
El cambio en la participación femenina en estos roles no fue sencillo. Aunque Ucrania derogó una ley soviética que prohibía a las mujeres acceder a ciertos trabajos en 2017, los efectos de esa normativa aún persisten en la sociedad. Aún hay estereotipos de género y resistencia por parte de algunos empleadores y familiares que dificultan la inclusión plena de mujeres en estos campos. A pesar de estos obstáculos, Kuzmina sigue adelante en las tareas del ejército porque tiene un fuerte compromiso con su país.
Yullia Kuzmina, contable ucraniana de 32 años, dejó su carrera en las finanzas tras la invasión rusa para unirse al ejército. Hoy desempeña un trabajo inesperado en el ámbito eléctrico, en un sector tradicionalmente dominado por hombres. Descubre su inspiradora historia. LA NACION
