Escándalo. Investigan si en una comisaría de Florencio Varela daban trato privilegiado a un policía preso por gatillo fácil

Efectivos de la Dirección General de Asuntos Internos de la Policía Bonaerense realizaron un procedimiento en la comisaría 3a. de Florencio Varela y encontraron a un detenido fuera de su celda. Se trata de Marcos Rosseti, un policía arrestado por un caso de gatillo fácil ocurrido en noviembre del año pasado.
El operativo se realizó a fines de enero en el marco de una investigación por presunto incumplimiento de los deberes de funcionario público. La causa, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2 de Florencio Varela, se inició tras una denuncia anónima que alertaba sobre presuntos privilegios dentro de la dependencia.
Cuando los efectivos ingresaron a la comisaría, encontraron a Rosseti fuera de su celda. Según trascendió en un primer momento, el policía detenido habría tenido acceso a toda la dependencia y compartía mates con el jefe de la seccional. Sin embargo, desde el Ministerio de Seguridad bonaerense negaron esa versión y afirmaron que el imputado había salido de su celda porque estaba en una oficina entrevistándose con su abogado defensor.
Rosseti fue detenido a fines del año pasado tras un episodio en el barrio San Rudecindo, de Florencio Varela. Según la investigación judicial, el agente disparó con una escopeta de postas de goma contra Ruth Cabral, una mujer de 31 años que no tenía relación con el conflicto en el que tuvieron que intervenir los policías. La víctima recibió el impacto de los proyectiles en el pecho y sufrió graves heridas que requirieron una intervención quirúrgica de urgencia.
El hecho ocurrió en el cruce de las calles Laguna Iberá y El Chocón, en un sector residencial de la localidad. Testigos indicaron que la policía llegó tras una discusión entre vecinos y que Rosseti, en medio del operativo, accionó su arma contra Cabral, quien se encontraba a pocos metros de la disputa. La bala de goma le perforó el esternón, lo que obligó a su internación inmediata.
El Juzgado de Garantías N°6 de Florencio Varela, a cargo de Diego Agüero, ordenó la detención del agente, quien sostuvo que el disparo fue accidental y ocurrió cuando la mujer intentó arrebatarle el arma. Sin embargo, la fiscalía presentó pruebas, entre ellas grabaciones y testimonios, que indicaban que la víctima no había participado de la confrontación y que no hubo intención de desarmar al policía.
Luego del arresto, Rosseti fue alojado en la comisaría 3a. de Florencio Varela, la misma dependencia donde había prestado servicio antes del hecho. La denuncia anónima que motivó el allanamiento apuntó a que el policía no cumplía con su detención en condiciones normales y que tenía acceso libre a distintas áreas de la dependencia.
El hallazgo de Asuntos Internos puso bajo la lupa a los oficiales a cargo de la seccional. Fuentes del caso señalaron que Rosseti nunca habría permanecido en una celda y que, en cambio, se movía libremente dentro de la comisaría. La versión inicial indicaba que el detenido tomaba mate con el comisario, pero el Ministerio de Seguridad bonaerense desmintió esta afirmación y sostuvo que Rosseti estaba en una reunión con su abogado.
A raíz del allanamiento y las irregularidades detectadas, el policía fue trasladado el 1° de febrero a la Alcaidía de Florencio Varela. La fiscalía continúa investigando si hubo un eventual encubrimiento y quiénes fueron los responsables de permitir su permanencia fuera de la celda.
Efectivos de la Dirección General de Asuntos Internos de la Policía Bonaerense realizaron un procedimiento en la comisaría 3a. de Florencio Varela y encontraron a un detenido fuera de su celda. Se trata de Marcos Rosseti, un policía arrestado por un caso de gatillo fácil ocurrido en noviembre del año pasado.
El operativo se realizó a fines de enero en el marco de una investigación por presunto incumplimiento de los deberes de funcionario público. La causa, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2 de Florencio Varela, se inició tras una denuncia anónima que alertaba sobre presuntos privilegios dentro de la dependencia.
Cuando los efectivos ingresaron a la comisaría, encontraron a Rosseti fuera de su celda. Según trascendió en un primer momento, el policía detenido habría tenido acceso a toda la dependencia y compartía mates con el jefe de la seccional. Sin embargo, desde el Ministerio de Seguridad bonaerense negaron esa versión y afirmaron que el imputado había salido de su celda porque estaba en una oficina entrevistándose con su abogado defensor.
Rosseti fue detenido a fines del año pasado tras un episodio en el barrio San Rudecindo, de Florencio Varela. Según la investigación judicial, el agente disparó con una escopeta de postas de goma contra Ruth Cabral, una mujer de 31 años que no tenía relación con el conflicto en el que tuvieron que intervenir los policías. La víctima recibió el impacto de los proyectiles en el pecho y sufrió graves heridas que requirieron una intervención quirúrgica de urgencia.
El hecho ocurrió en el cruce de las calles Laguna Iberá y El Chocón, en un sector residencial de la localidad. Testigos indicaron que la policía llegó tras una discusión entre vecinos y que Rosseti, en medio del operativo, accionó su arma contra Cabral, quien se encontraba a pocos metros de la disputa. La bala de goma le perforó el esternón, lo que obligó a su internación inmediata.
El Juzgado de Garantías N°6 de Florencio Varela, a cargo de Diego Agüero, ordenó la detención del agente, quien sostuvo que el disparo fue accidental y ocurrió cuando la mujer intentó arrebatarle el arma. Sin embargo, la fiscalía presentó pruebas, entre ellas grabaciones y testimonios, que indicaban que la víctima no había participado de la confrontación y que no hubo intención de desarmar al policía.
Luego del arresto, Rosseti fue alojado en la comisaría 3a. de Florencio Varela, la misma dependencia donde había prestado servicio antes del hecho. La denuncia anónima que motivó el allanamiento apuntó a que el policía no cumplía con su detención en condiciones normales y que tenía acceso libre a distintas áreas de la dependencia.
El hallazgo de Asuntos Internos puso bajo la lupa a los oficiales a cargo de la seccional. Fuentes del caso señalaron que Rosseti nunca habría permanecido en una celda y que, en cambio, se movía libremente dentro de la comisaría. La versión inicial indicaba que el detenido tomaba mate con el comisario, pero el Ministerio de Seguridad bonaerense desmintió esta afirmación y sostuvo que Rosseti estaba en una reunión con su abogado.
A raíz del allanamiento y las irregularidades detectadas, el policía fue trasladado el 1° de febrero a la Alcaidía de Florencio Varela. La fiscalía continúa investigando si hubo un eventual encubrimiento y quiénes fueron los responsables de permitir su permanencia fuera de la celda.
El caso fue reportado por Asuntos Internos durante una visita de control; desde el Ministerio de Seguridad bonaerense desmintieron que hubiera supuestos beneficios para el detenido y afirmaron que no solo salió de la celda para entrevistarse con su abogado LA NACION