La vida de Marcelo Moretti en San Lorenzo: quién es, sus 15 años con el club y los ruidos que lleva su gestión

Impacta la imagen tan natural de Marcelo Moretti en los videos que se difundieron en la noche del lunes en Canal 9, en una clara cámara oculta realizada hace alrededor de un año en la que se lo observa tomar fajos de miles de dólares (US$25.000) a cambio, supuestamente, del fichaje de un joven para que pudiera ser parte de las juveniles azulgranas. Los directivos vuelan de bronca y, durante el martes, debatieron sobre cómo accionar: soltarle la mano parece ser la opción prioritaria, sin vuelta atrás.
Un año y cuatro meses de gestión como presidente de San Lorenzo en el que, lejos de espantar buena parte de los interminables dramas económicos que acusa heredar del pasado gobierno, del que además fue parte, le fue agregando capítulos burdos que subieron aún más la temperatura del hincha, incluso del que lo votó y hace rato se hartó de sus manejos. Ahora, esto. No extrañó que cientos de hinchas cantaran en su contra en el Polideportivo Pando, donde San Lorenzo jugó contra Platense por la Liga Nacional de básquet. “Dirigentes, no se los decimos más; si no llaman a elecciones, qué quilombo se va a armar”, se escuchó en las tribunas.
Desesperados por la opción más confiable, los socios se acercaron al polideportivo el 17 de diciembre de 2023, incluso en una jornada de lluvia que amenazaba con una baja presencia de votantes y que terminó marcando un récord en la historia del club: fueron 16.358, de los cuales el 36,73% (6.009 votos) depositó su confianza en su lista “Boedo en Acción”. No importó el pasado de Moretti, que formó parte como vocal de las presidencias de Matías Lammens y, posteriormente, subió el rango en la de Marcelo Tinelli, a los que terminó enfrentando tras su renuncia en septiembre de 2021 por múltiples diferencias. La gente confió por ese desafío contra dirigentes que, en la opinión del hincha, le hicieron mal al club, pero todo parece ir a contramano.
Es que, entre sus promesas, además de adoptar una conducción transparente, habló de que “el proyecto es con Rubén Darío Insua (por entonces, el entrenador) a la cabeza”, querer “llevar a San Lorenzo a protagonizar todos los torneos”, de hacer “una auditoría a corto plazo” y hacer “el estadio Papa Francisco en el menor plazo posible”.
Una vez que se impuso en los comicios, comenzó con sus decisiones. Le renovó el vínculo al “Gallego” por dos años, prometiendo “armarle un equipo competitivo”: si bien el ahora técnico de Barracas Central había pedido seis refuerzos y que no se fueran ninguno de los 14 jugadores que consideraba fundamentales, el mandatario alimentó el plantel con el doble de lo solicitado, aunque varios que no eran del interés del DT, lo que generó un tire y afloje. No pudo cumplirle el deseo de comprarle a River a Augusto Batalla ni arreglar con ellos la contratación de Agustín Palavecino, promesas charladas con el entrenador.
Antes de los cuatro meses lo echó, decisión que dijo haber delegado al ex volante Néstor Ortigoza, su elegido para ser el encargado del fútbol azulgrana: debió echarlo el año pasado, tras las denuncias de la ex pareja por violencia de género.
Por otro lado, el equipo hoy está celebrando un desahogo al ya verse en los octavos de final del Torneo Apertura: en 2024 terminó la Copa de la Liga en el 10° puesto de 14 equipos, se quedó en octavos de final de la Copa Libertadores y finalizó en la posición 24 de 28 participantes en la Liga Profesional. Es decir, hasta aquí no tuvo nada de competitivo. ¿La pronta auditoría? Este último marzo, un año y tres meses después de su asunción, recién se oficializó la finalización de la misma, sin brindarle al socio e hincha más detalles que la cantidad de juicios (183) y la supuesta deuda que afronta (US$ 30.000.000).
En cuanto al estadio, pretendiendo 60 mil personas sentadas, avisó que necesitaría unos 100 millones de dólares “nada fáciles de juntar en un país complicado a nivel económico y social”. En la noche del martes, en medio de su aparición pública en TyC Sports (llamativamente tarde), mencionó al pasar que pronto presentará el proyecto y el financiamiento. Es decir, recién ahora empezaría a avanzar.
Empresario gastronómico y abogado laboralista, siguió en cierta parte los pasos de su padre Luis Ángel, fallecido el pasado 3 de marzo: también fue abogado y fanático de San Lorenzo, uno de los motivos por el cual Moretti advirtió este martes que “no me mancharía”. Tuvo su primera postulación a presidente en 2010, pero no con la fuerza que fue ganando mediante los nueve años acompañando a la dupla Lammens-Tinelli. Es decir que, con 49 años, buena parte de su vida la pasó en el Nuevo Gasómetro.
En las redes recordaron otra de las promesas a raíz del escándalo: una entrevista vía streaming que hizo junto a Agustín Muzzupappa, periodista, abogado e hincha del “Ciclón”, antes de los comicios. ¿Qué dijo el ahora presidente? “Con Moretti se acaban el clientelismo, el amiguismo, los protocolos, el club de amigos. Se acaba que juegue el hijo de tal, se acaba el ‘che, probámelo porque este es amigo de un amigo’. Se acaba. Con Moretti se acaban los kioscos”, sentenció.
Sin embargo, llamaron la atención ciertas contrataciones hechas hace más de un año. La más polémica fue la de Maximiliano Zelaya, un central que llegó cuando tenía 26 años, pero para integrar la reserva. Mariano, su padre, es representante en varios ámbitos, además de cercano a Moretti: apenas jugó unos minutos en primera durante los amistosos de este verano. Ese mismo hombre acercó a Orlando Gill, aunque aquella se trató de una apuesta acertada. Otro, aislado de Zelaya, fue Juan Cruz Vega, que llegó también para sumarse a la reserva con 25 años. “Reforzaron mejor a la tercera que a la primera”, dijo Insua una vez, por más que luego le bajó la espuma al fastidio. ¿Les suena?
Entre tantos problemas, la recordada negociación por Matías Reali: Daniel Vila, presidente de Independiente Rivadavia de Mendoza, acusó a Moretti de presentar comprobantes truchos y no abonar el pago. Se cayó el pase hasta que la tesorería desembolsó lo que correspondía. Además, el público repudió hace unos meses las ventas de una gran promesa como Santiago Sosa y Agustin Hausch a Defensa y Justicia, un combo por un total de US$ 1.500.000. Maniobra apresurada con juveniles para pagar deudas: no gustó ni se olvida.
Aciertos también hay, claro. Por ejemplo, la contratación de alguien desconocido que se transformó en una absoluta figura, como Jhohan Romaña. Y lo más resonante fue conseguir que Iker Muniain quiera vivir la experiencia de vestirse de azulgrana. Aunque noticias como las de las últimas horas tapan toda virtud, sobre todo si son más las malas y tampoco llega algún título.
“A la gente le digo que confíe en este gran proyecto que tenemos, no les vamos a fallar: que estén tranquilos que vamos a hacer las cosas bien. Queremos la segunda Libertadores”, dijo apenas asumió. Lejos de la Copa, Marcelo Moretti acumula polémicas y hay olor a pedido de renuncia por parte de sus pares.
La decisión de la AFA
La difusión de las imágenes puso en alerta a todo el fútbol argentino. El Tribunal de Ética de la AFA, presidido por Diego Barroetaveña, podría incluso tomar cartas en el asunto y analizar el caso, aunque habrá que esperar para ver si toma alguna determinación contra el presidente de San Lorenzo. Quedó claro que Moretti no piensa renunciar. Incluso, el dirigente dijo que le explicó ayer por la situación a muchos asambleístas del club y, también, a pares de la AFA. Reveló, también, que habló con Claudio “Chiqui” Tapia y, según Moretti, el presidente de la AFA le dio su apoyo. La entidad madre difundió anoche un comunicado en el que dice haber “instruido a los Órganos Jurisdiccionales de la AFA, a través del Tribunal de Ética, para que se inicien los actuados tendientes a investigar lo acontecido”, y recordó “el irrevocable derecho a la debida defensa del involucrado. En tiempo propio y a través de su fallo que será comunicado a través del pertinente Boletín Oficial se dará a conocer la decisión adoptada”.
Impacta la imagen tan natural de Marcelo Moretti en los videos que se difundieron en la noche del lunes en Canal 9, en una clara cámara oculta realizada hace alrededor de un año en la que se lo observa tomar fajos de miles de dólares (US$25.000) a cambio, supuestamente, del fichaje de un joven para que pudiera ser parte de las juveniles azulgranas. Los directivos vuelan de bronca y, durante el martes, debatieron sobre cómo accionar: soltarle la mano parece ser la opción prioritaria, sin vuelta atrás.
Un año y cuatro meses de gestión como presidente de San Lorenzo en el que, lejos de espantar buena parte de los interminables dramas económicos que acusa heredar del pasado gobierno, del que además fue parte, le fue agregando capítulos burdos que subieron aún más la temperatura del hincha, incluso del que lo votó y hace rato se hartó de sus manejos. Ahora, esto. No extrañó que cientos de hinchas cantaran en su contra en el Polideportivo Pando, donde San Lorenzo jugó contra Platense por la Liga Nacional de básquet. “Dirigentes, no se los decimos más; si no llaman a elecciones, qué quilombo se va a armar”, se escuchó en las tribunas.
Desesperados por la opción más confiable, los socios se acercaron al polideportivo el 17 de diciembre de 2023, incluso en una jornada de lluvia que amenazaba con una baja presencia de votantes y que terminó marcando un récord en la historia del club: fueron 16.358, de los cuales el 36,73% (6.009 votos) depositó su confianza en su lista “Boedo en Acción”. No importó el pasado de Moretti, que formó parte como vocal de las presidencias de Matías Lammens y, posteriormente, subió el rango en la de Marcelo Tinelli, a los que terminó enfrentando tras su renuncia en septiembre de 2021 por múltiples diferencias. La gente confió por ese desafío contra dirigentes que, en la opinión del hincha, le hicieron mal al club, pero todo parece ir a contramano.
Es que, entre sus promesas, además de adoptar una conducción transparente, habló de que “el proyecto es con Rubén Darío Insua (por entonces, el entrenador) a la cabeza”, querer “llevar a San Lorenzo a protagonizar todos los torneos”, de hacer “una auditoría a corto plazo” y hacer “el estadio Papa Francisco en el menor plazo posible”.
Una vez que se impuso en los comicios, comenzó con sus decisiones. Le renovó el vínculo al “Gallego” por dos años, prometiendo “armarle un equipo competitivo”: si bien el ahora técnico de Barracas Central había pedido seis refuerzos y que no se fueran ninguno de los 14 jugadores que consideraba fundamentales, el mandatario alimentó el plantel con el doble de lo solicitado, aunque varios que no eran del interés del DT, lo que generó un tire y afloje. No pudo cumplirle el deseo de comprarle a River a Augusto Batalla ni arreglar con ellos la contratación de Agustín Palavecino, promesas charladas con el entrenador.
Antes de los cuatro meses lo echó, decisión que dijo haber delegado al ex volante Néstor Ortigoza, su elegido para ser el encargado del fútbol azulgrana: debió echarlo el año pasado, tras las denuncias de la ex pareja por violencia de género.
Por otro lado, el equipo hoy está celebrando un desahogo al ya verse en los octavos de final del Torneo Apertura: en 2024 terminó la Copa de la Liga en el 10° puesto de 14 equipos, se quedó en octavos de final de la Copa Libertadores y finalizó en la posición 24 de 28 participantes en la Liga Profesional. Es decir, hasta aquí no tuvo nada de competitivo. ¿La pronta auditoría? Este último marzo, un año y tres meses después de su asunción, recién se oficializó la finalización de la misma, sin brindarle al socio e hincha más detalles que la cantidad de juicios (183) y la supuesta deuda que afronta (US$ 30.000.000).
En cuanto al estadio, pretendiendo 60 mil personas sentadas, avisó que necesitaría unos 100 millones de dólares “nada fáciles de juntar en un país complicado a nivel económico y social”. En la noche del martes, en medio de su aparición pública en TyC Sports (llamativamente tarde), mencionó al pasar que pronto presentará el proyecto y el financiamiento. Es decir, recién ahora empezaría a avanzar.
Empresario gastronómico y abogado laboralista, siguió en cierta parte los pasos de su padre Luis Ángel, fallecido el pasado 3 de marzo: también fue abogado y fanático de San Lorenzo, uno de los motivos por el cual Moretti advirtió este martes que “no me mancharía”. Tuvo su primera postulación a presidente en 2010, pero no con la fuerza que fue ganando mediante los nueve años acompañando a la dupla Lammens-Tinelli. Es decir que, con 49 años, buena parte de su vida la pasó en el Nuevo Gasómetro.
En las redes recordaron otra de las promesas a raíz del escándalo: una entrevista vía streaming que hizo junto a Agustín Muzzupappa, periodista, abogado e hincha del “Ciclón”, antes de los comicios. ¿Qué dijo el ahora presidente? “Con Moretti se acaban el clientelismo, el amiguismo, los protocolos, el club de amigos. Se acaba que juegue el hijo de tal, se acaba el ‘che, probámelo porque este es amigo de un amigo’. Se acaba. Con Moretti se acaban los kioscos”, sentenció.
Sin embargo, llamaron la atención ciertas contrataciones hechas hace más de un año. La más polémica fue la de Maximiliano Zelaya, un central que llegó cuando tenía 26 años, pero para integrar la reserva. Mariano, su padre, es representante en varios ámbitos, además de cercano a Moretti: apenas jugó unos minutos en primera durante los amistosos de este verano. Ese mismo hombre acercó a Orlando Gill, aunque aquella se trató de una apuesta acertada. Otro, aislado de Zelaya, fue Juan Cruz Vega, que llegó también para sumarse a la reserva con 25 años. “Reforzaron mejor a la tercera que a la primera”, dijo Insua una vez, por más que luego le bajó la espuma al fastidio. ¿Les suena?
Entre tantos problemas, la recordada negociación por Matías Reali: Daniel Vila, presidente de Independiente Rivadavia de Mendoza, acusó a Moretti de presentar comprobantes truchos y no abonar el pago. Se cayó el pase hasta que la tesorería desembolsó lo que correspondía. Además, el público repudió hace unos meses las ventas de una gran promesa como Santiago Sosa y Agustin Hausch a Defensa y Justicia, un combo por un total de US$ 1.500.000. Maniobra apresurada con juveniles para pagar deudas: no gustó ni se olvida.
Aciertos también hay, claro. Por ejemplo, la contratación de alguien desconocido que se transformó en una absoluta figura, como Jhohan Romaña. Y lo más resonante fue conseguir que Iker Muniain quiera vivir la experiencia de vestirse de azulgrana. Aunque noticias como las de las últimas horas tapan toda virtud, sobre todo si son más las malas y tampoco llega algún título.
“A la gente le digo que confíe en este gran proyecto que tenemos, no les vamos a fallar: que estén tranquilos que vamos a hacer las cosas bien. Queremos la segunda Libertadores”, dijo apenas asumió. Lejos de la Copa, Marcelo Moretti acumula polémicas y hay olor a pedido de renuncia por parte de sus pares.
La decisión de la AFA
La difusión de las imágenes puso en alerta a todo el fútbol argentino. El Tribunal de Ética de la AFA, presidido por Diego Barroetaveña, podría incluso tomar cartas en el asunto y analizar el caso, aunque habrá que esperar para ver si toma alguna determinación contra el presidente de San Lorenzo. Quedó claro que Moretti no piensa renunciar. Incluso, el dirigente dijo que le explicó ayer por la situación a muchos asambleístas del club y, también, a pares de la AFA. Reveló, también, que habló con Claudio “Chiqui” Tapia y, según Moretti, el presidente de la AFA le dio su apoyo. La entidad madre difundió anoche un comunicado en el que dice haber “instruido a los Órganos Jurisdiccionales de la AFA, a través del Tribunal de Ética, para que se inicien los actuados tendientes a investigar lo acontecido”, y recordó “el irrevocable derecho a la debida defensa del involucrado. En tiempo propio y a través de su fallo que será comunicado a través del pertinente Boletín Oficial se dará a conocer la decisión adoptada”.
El presidente quedó en jaque tras la publicación de videos que lo comprometen y su aparición en televisión lo perjudicó más LA NACION